Es comúnmente conocida la marcha del Primero de Mayo en Bogotá aunque la primera de ellas era muy diferente a como es hoy en día.
El Día Internacional del Trabajo se celebra el 1° de mayo y con este, los países del mundo se organizan en marchas y manifestaciones en favor de exigir mejorías en las condiciones de los trabajadores con respecto a salario, trabajo digno y horarios, entre otros.
Este día surge en el contexto de la Revolución Industrial, con la cual llegan campesinos e inmigrantes a Chicago, Estados Unidos, en busca de trabajo. Se organizó para 1884 el 4° Congreso de la American Federation of Labor con el cual se decretaba que desde el 1° de mayo la jornada laboral para los obreros debía ser de 8 horas diarias, quienes entrarían en huelga si no se cumplía el mandato.
Frente a esta situación, el entonces presidente de Estados Unidos Andrew Johnson, decretó la Ley Ingersoll, por la cual se establecía la jornada laboral de 8 horas diarias. A pesar de ello, muchos dueños de las fábricas no cumplieron con lo establecido y se organizó una manifestación con cerca de 800 mil trabajadores. Estas protestas duraron cuatro días hasta que estalló una bomba lanzada por un protestante a la Policía, dejando muertos y heridos; los presuntos implicados fueron condenados a prisión o a la horca.
En Colombia, la celebración de este día llegó varios años después, en 1914, y con características específicas que lo diferencian del resto del mundo. El desfile fue convocado por la Unión Obrera de Colombia, organización de artesanos del país; tuvo lugar al medio día en la Plaza de Nariño y terminó en el Barrio La Perseverancia de Bogotá. Al llegar allí, se colocó la primera piedra de una columna que se haría en conmemoración al trabajo. Algunos símbolos utilizados fueron una bandera blanca que lideraba el desfile, coronas de flores e instrumentos de trabajo llevados por los hijos de los obreros, mientras se entonaba el Himno Nacional.
Lo curioso de esta celebración fue que no hacía ninguna alusión al Día Internacional del Trabajo, ni tenía el tinte socialista-anarquista, como sí ocurría en otros países; era más una ocasión de conmemoración a la situación del obrero o más bien de la clase obrera que se estaba consolidando, con aires de Revolución Francesa, en cuanto a que exigían los mismos derechos: “libertad, fraternidad, igualdad”.
Algunas de las exigencias por las que se reunieron aquel 1° de mayo de 1914, fueron el derecho al trabajo y a los medios de producción, a la dignidad laboral y en general a la vida digna. Se aspiraba también a que hubiera cierta unidad entre los obreros-artesanos, a través de la organización de gremios, sin tintes políticos que los dividieran. Esta fue una fecha que permitió que en adelante los obreros cuestionaran su situación de trabajadores con ciertas condiciones precarias y se manifestaran al respecto.
Contexto actual
Hoy en día, la celebración del 1° de mayo incluye a mucho más gremios, sino a todas las organizaciones de trabajadores en las principales ciudades del país. Sindicatos como la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) o la Confederación de Trabajadores de Colombia (CTC), marchan todos los años exigiendo mejor calidad de vida para los trabajadores.
Según Humberto Correa, Secretario de Derechos Humanos de la CGT, en la conmemoración de este año, la Confederación respaldará principalmente el proceso de paz pues el movimiento sindical ha sido uno de los más afectados dentro del conflicto armado colombiano; a través de los diálogos, se está negociando con el Gobierno acerca de una reparación integral a estas víctimas.
La CGT también resaltará la reivindicación de las luchas de los trabajadores, a propósito del paro judicial. Además, estarán presentes consignas acerca de la necesidad de mayor empleo, pues según Correa, la precarización del empleo es un tema muy grande en el país.
A pesar de que a lo largo de las marchas que han ocurrido en Colombia para esta fecha, se han presentado disturbios con violencia y heridos, la motivación principal de estas manifestaciones siempre ha sido el mejoramiento de las condiciones de los trabajadores. Cada año se reúnen a exigir los mismos derechos que hace 100 años, pues con el pasar del tiempo, sin bien las condiciones han mejorado, aún falta mucho por resolver, según lo demuestran la gran cantidad de personas que marchan cada 1° de mayo.