Hablan de parejas de juego, de la estrategia, del tiempo que les toma una jugada, de lo difícil que es vencer a los demás equipos y de lo bueno que es perder cuando se ve desde el lado en que sólo el equipo ganador queda fuera de la celebración. Hablan de mundiales y de nacionales, de Brasil, de China, de Francia, de Cali y de Medellín. Hablan de viajes en avión, de escalas eternas, de amigos, de maletas gigantes con las ruedas rotas que se tuvieron que arrastrar para cruzar Paris, de montañas interminables para comprar cerveza barata. Se les iluminan los ojos al hablar de conocer el mundo a su manera, haciendo eso que les gusta, ¿qué les gusta?
Es difícil saber de qué están hablando, ¿fútbol?, ¿baloncesto?, ¿voleibol? Seguro no es ciclismo, ya se hubiesen referido a sus bicicletas, ¿natación?, ¿gimnasia?... ¡tenis!, ¿tenis?, no…
Escuchar a alguien hablar del Bridge es casi lo mismo que escucharlo hablar de otro deporte, hasta que uno cae en cuenta que se trata de un juego de cartas. ¿Qué digo juego?, de un deporte, de un deporte olímpico, que en Colombia cuenta hasta con un equipo que representa al país a nivel internacional.
De la prohibición al reconocimiento olímpico
No existe una historia de cómo se crearon las cartas, ni los diferentes juegos que se establecieron con ellas, pero la mayoría de las teorías apunta a China. Se dice que, durante la edad media, y con la masificación de la imprenta los costos de producción de las cartas se redujeron tanto que dejaron como consecuencia su multiplicación. Con la popularidad que trajeron consigo, y la distracción y ocio de las que eran representativas, las cartas se convirtieron en un elemento característico de las tabernas; pasaron de la popularidad a la ilegalidad, de la ilegalidad a la regulación y hoy hasta son deporte olímpico.
De la historia del Bridge se tienen un poco más de certeza. La Asociación del Bridge Argentino, habla de su aparición y primera mención en Gran Bretaña, en la carta de un coronel que data de 1873, en la que se refiere al juego como a uno de Constantinopla con el nombre de biritch. Se ha llegado a decir también, y de una forma más romántica. que su nombre viene del inglés “puente” haciendo referencia al juego como un puente a la amistad.
En 1960 se celebra la primera Olimpiada de Bridge coincidiendo con las olimpiadas deportivas. De esta forma el Bridge pasa de entretenimiento social a juego de competición y empiezan a constituirse los diversos Organismos Internacionales y Ligas Nacionales que coordinan la actividad y organización de competiciones y campeonatos.
Actualmente el juego se practica al rededor del mundo. Más de 125 países cuentan con una Federación Nacional de Bridge, o entidad análoga, que lo regula. Existen diferentes clubes de Bridge y hay más de 900.000 personas con una licencia federativa para poder competir en los eventos locales, nacionales e internacionales celebrados en los cinco continentes.
Vivir del Bridge, por y para él
En el deporte, al igual que en la música, es difícil pensar que alguien pueda a llegar a vivir de una única actividad en el campo, pero la excepción a la regla no deja de hacerse presente por esto. Hay gente que vive del Bridge, en Estados Unidos, por ejemplo, donde hay muchos jugadores profesionales (sponsors), a los que usualmente millonarios les pagan por jugar con ellos. Por otro lado, existen también a los que se les paga una especie de salario para competir en torneos de gran nivel.
“El Bridge me ha dejado mucho”, afirma Cuervo, a sus tan sólo 22 años. Más allá de que lo reta, por los viajes y experiencias que ha podido tener, le gusta la posibilidad que le ha abierto para relacionarse con gente mayor. “Es algo que uno normalmente no hace, no cualquiera tiene amigos de 50 años”. El deporte le ha permitido, por medio de un interés en común, hacer amistades de todas las generaciones.
“Psicológicamente el deporte es muy difícil”, comenta el jugador, y es que en la mayoría de los deportes, a medida que se desarrolla el juego, los jugadores saben cómo van, si están ganando o no. En el Bridge no sabes qué pasa en otras mesas y, en ese orden de ideas, tampoco sabes cómo vas. “Es muy interesante, tiene muchos conceptos de manejo de riesgo, probabilidad, control sobre uno mismo, atención, memoria y analítica”. Estos factores, sumados a las reglas universales del juego, le permite asegurar con pasión que “El Bridge es un idioma universal, puedes entender lo que el otro dice sin necesidad de hablar su mismo idioma”.
El Bridge en Colombia
Según el último reporte del Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), relativo a los clubes deportivos de la ciudad con reconocimiento vigente, sólo 5 estaban relacionados con el Bridge, un número que se queda corto frente a las altas cifras de otros deportes como el fútbol, que rondaban los 300, o el baloncesto y ciclismo, que rondaban los 40.
En 1991 el Comité Olímpico Internacional reconoció a la Federación Mundial de Bridge como a una federación olímpica. Desde ese entonces es considerado deporte para todos los efectos que esto implica, con la excepción de que no participa en los juegos olímpicos, otorgándole, en últimas, el mismo estatus deportivo que a deportes como el golf, squash, ajedrez, karate, entre otros. Ese reconocimiento de deporte olímpico, se le otorga a los deportes que conocen mundialmente las mismas reglas.
Para 2018, uno de los sectores que más se vería afectado sería el del deporte, con un recorte del 62,3 % del dinero que les fue entregado para ese año. Juan Felipe Cuervo, integrante del equipo de Bridge juvenil de Colombia, afirma que hoy por hoy "Coldeportes no apoya nada. Para el Campeonato Sudamericano Juvenil de este año, cada uno pagó los pasajes con su propia plata".
Añade que "afortunadamente hubo ayuda de confederación suramericana y confederación mundial en cuanto a la estadía". Para el campeonato juvenil de Bridge de este año, en China, la situación no fue diferente: los recursos para asistir vinieron de sus propios bolsillos, y de una que otra donación o pequeño aporte.
¿Cómo se juega?
Intentar explicar el Bridge es más complicado de lo que parece. En cosas como el deporte la práctica fortalece la actividad, y no sólo eso, también la comprensión de la misma, pero intentaré explicar el juego, así como me lo explicaron a mí. Para jugar Bridge sólo se necesitan cuatro personas (dos parejas) y una baraja de 52 cartas.
El objetivo del juego es ganar basas (conjunto de 4 cartas jugadas en turno por cada jugador). Primero se reparten las 52 cartas, 13 a cada jugador. La primera carta de la basa, puesta por cualquiera de los jugadores, indica el palo (Picas, Corazones, Diamantes o Tréboles) al que se debe contribuir, es decir indica el palo que tienen que poner las cartas los jugadores restantes, gana la basa el que ha jugado la carta más alta.
Por ejemplo:
- Tenemos 4 Jugadores Juan, David, Mateo y Luis. Juan y David son equipo (#1) y Mateo y Luis también (#2).
- Juan pone la primera carta en la mesa, es un 8 de tréboles negros, Luis pone la segunda, un 7 de tréboles negros, David pone un 7 de tréboles negros también y Mateo un 5 de tréboles negros.
- La basa es ganada por el equipo de Juan y David (#1) porque Juan jugó la carta más alta, un 8 de tréboles negros
Par aumentar la dificultad cada pareja se compromete a ganar un número de basas establecido para su equipo con un palo como triunfo. Cuando se determina un palo de triunfo una basa será ganada no por la carta más alta, sino por el triunfo más alto jugado por el que no haya podido contribuir al palo solicitado por la primera carta de la basa.
Por ejemplo:
- Tenemos 4 Jugadores Juan, David, Mateo y Luis. Juan y David son equipo (#1) y Mateo y Luis también (#2).
- El equipo #1 se compromete a ganar 3 basas con los corazones rojos como triunfo. El equipo #2 se compromete a ganar 3 basas con los diamantes rojos como triunfo.
- Juan pone la primera carta en la mesa, es un 8 de tréboles negros, Luis pone la segunda, un 7 de tréboles negros, David pone un 7 de tréboles negros también y Mateo un 3 de diamantes rojos.
- La basa es ganada por el equipo de Luis y Mateo (#2) porque Mateo, al no tener corazones rojos y saber que su equipo se había comprometido a ganar las basas con diamantes rojos, puso, justamente, un diamante rojo.
El bridge tiene varios repartos, el objetivo en el primero es alcanzar el puntaje más alto con las cartas dadas. Con el tiempo, el puntaje se basa en recompensas y castigos dados por la relación entre el número de basas ganadas de la primera forma y de la segunda.