En una charla informal con el director de la maestría en Periodismo, Juan Carlos Iragorri, Martín Caparrós se reunió con la comunidad rosarista el pasado martes 10 de abril en el marco de la lección inaugural de dicha maestría.

Con un viaje nostálgico por la memoria, Caparrós, de 61 años, comenzó compartiendo algunas de sus anécdotas como periodista y fotógrafo aficionado en la década de los setenta. Durante la siguiente hora y media, compartió su opinión frente a los retos que hoy enfrentan los periodistas.

Según el argentino, el periodismo actual enfrenta una serie de dificultades que van desde la financiación y la promoción publicitaria, hasta las populares fake news o noticias falsas. Para el autor del libro El Hambre, más allá de eso, lo más importante es crear un buen periodismo que vaya "contra el público", es decir, que narre lo que las personas a veces no quieren saber para no incomodarse, pero que deberían saber.

El gremio mundial del periodismo, sin embargo, está preocupado por las noticias falsas que se viralizan rápidamente en Internet, pero ¿son las fake news una amenaza real contra el buen periodismo? Para Caparrós, estas no son motivo de angustia. “Siempre hubo fake news, solo los americanos (estadounidenses) suponen que es una novedad. Inventaron el agua tibia”, afirmó con seguridad.

El novelista cree que la cuestión se encuentra en la calidad periodística y no en la cantidad. Según él, con la llegada de Internet, los medios tienen que dejar de creer en los tamaños de los textos como si de ellos dependiera la buena labor periodística actual. En ese sentido, en cambio, deberían rescatarse y perfeccionarse la ética y el rigor de la profesión.

Al enfrentarse al cuestionamiento sobre el futuro del periodismo, el ganador del premio de periodismo Rey de España se refirió a la primera gran habilidad de los periodistas, que según él es hacer y hacerse las preguntas apropiadas en un cualquier situación, una habilidad que debería guiar el futuro del oficio.

En cuanto al rumbo del periodismo, Caparrós también se refirió a una crisis de los medios clásicos o tradicionales con los que el público ha convivido durante mucho tiempo. Según él, el periodismo en sí mismo no se encontraría en crisis, sino que sus modelos de transmisión (digitales) estarían pasando por una transición que los grandes medios no quieren apropiar, por lo que convencen a su público de un supuesto decaimiento de calidad en la labor periodística.

"Ser crítico con los medios", fue la exhortación final del escritor y periodista. Afrontando la gran cantidad de nuevos medios que inundan Internet, para el autor argentino no se puede olvidar que estos siempre hablan desde algún lugar político: “No hay manera de no dar una visión no sesgada, no hay relato no subjetivo, porque todo relato está hecho por un sujeto”.

Lo invitamos a explorar la siguiente línea de tiempo con algunos de los momentos más importantes de su trayectoria profesional.