Las caminatas van a diferentes destinos como el Pico del Águila, el Valle de las Moras, la Cascada en la Cueva, o el nacimiento de las Quebradas la Vieja y Arzobispo. Guías profesionales, paramédicos y policías acompañan a los caminantes, desde el inicio hasta el final del recorrido. Los distintos senderos se recorren aproximadamente en 3 o 4 horas y alcanzan hasta los 3200 msnm. La dificultad de los distintos recorridos varía entre media y alta según las condiciones físicas del caminante.
Andrés Bocanegra, paramédico que acompaña estos recorridos opina que “la caminata es un ejercicio muy completo si se hace con disciplina. Pueden hacerlo personas de todas las edades siempre y cuando tengan autonomía en sus movimientos.” Martha Portilla, de 61 años, es senderista aficionada e integra uno de tantos grupos de caminantes que hay en Bogotá, como los Patialegres o los Patilargos. Ella afirma que “cómo alternativa a la ciclovía las caminatas de montaña ofrecen las bondades del aire puro, la calma, el silencio y el agua fresca de las quebradas“.
Desde hace seis años el IDRD ha apoyado la iniciativa de colectivos como Amigos de la Montaña, de recuperar los espacios verdes aledaños a la ciudad y devolverles a los bogotanos la posibilidad de disfrutar de las áreas boscosas y de montaña que ofrece la geografía de la capital. Jorge Blanco, fundador de amigos de la montaña, dice que “estas iniciativas le apuntan a que la ciudadanía se apropie de las riquezas naturales que ofrece la sabana y valoren más el lugar donde viven, que es algo que le falta mucho a los ciudadanos”.
Por parte del IDRD, Deivy Blanco, experimentado guía, afirma que hay más de 40 destinos que rodean la ciudad, no solo en los cerros, sino también en los distintos humedales y paramos que resguardan a Bogota. Las personas que deseen hacer parte de esta iniciativa, deben estar pendientes de la página web www.idrd.gov.co donde cada semana se publica cual es el siguiente destino y donde debe llenar el formulario de inscripción gratuita al recorrido. Finalmente presentarse puntual al sitio de encuentro, llevar hidratación, ropa cómoda y sobretodo muy buena energía.