Miriam Escobar tiene espondilitis anquilosante desde los 16 años. Había lidiado con esta enfermedad sin que le afectara su vida profesional hasta enero de este año (con 38 años), cuando recibió su liquidación de la multinacional en la que trabajaba. Este duro momento, como ella lo describe, es producto de un desmayo en su oficina por el que descubrió que la espondilitis había atacado su cerebro. Estuvo tres meses hospitalizada sin poder hablar ni mover las manos y con pérdida de la visión, por lo que los especialistas le recetaron incapacidad permanente. Así, desempleada y en graves condiciones de salud, la EPS de Compensar la remitió a pedir su pensión por invalidez en Colfondos.
Este trámite incluye tres pasos en lo que se decide si brindarle o no la pensión que exige la persona. Miriam llegó hasta la tercera instancia para ser revisada minuciosamente por un doctor quien al terminar le asignó un puntaje de 48,9 de incapacidad, cuando el requerido para otorgar el beneficio económico era de 49,9. Ante la situación, Miriam empezó a trabajar como traductora desde su casa y a sobrellevar su enfermedad tanto con quimioterapia experimental como con diversas ayudas espirituales como las asesorías con ángeles.
El espacio donde Adriana Sierra Serrano realiza las asesorías con ángeles. Foto por: Adriana Sierra Serrano
¿De qué se tratan las asesorías con ángeles?
Según Dolly González Hernández, asesora de ángeles en Bogotá, estas sesiones consisten en “facilitar un espacio de tiempo energético donde se traduce e interpreta qué es lo que los ángeles tienen como mensaje para cada persona en particular”. A su vez, Adriana Sierra Serrano, otra asesora en esta área, compartió la siguiente metáfora, que describe claramente esta práctica: “funciona como un teléfono, el asesor le marca a la persona y a sus ángeles y cuando consigue la comunicación servimos de cable para transmitir el mensaje”.
Pero, ¿qué son los ángeles? Para González, ellos “hacen parte de tu ser de conciencia, entonces son aspectos de tu alma. Son esa conexión con, como lo llames, la fuente o Dios”. Se puede encontrar una gran diversidad de ángeles, pero hay uno en especial que acompaña a las personas desde que nacen hasta que mueren o trascienden; como dicen las angeólogas, el ángel de la guarda. Él tiene la tarea de ayudarle a “cumplir el objetivo del alma a cada persona”, explica Sierra.
Sobre las sesiones de esta práctica, que Sierra y González ofrecen, ellas comentaron que empiezan con la sincronización de la respiración entre asesora y cliente. En ese momento, la asesora se conecta con el presente y con su corazón, en donde a través de la meditación ha desarrollado la empatía para conectarse con el corazón de sus clientes. La conexión sucede desde el amor incondicional que empiezan a sentir por su cliente, según cuenta, y desde ahí se produce el vínculo con los ángeles que pueden ser de la persona o de temas en específico. Los ángeles se comunican a través de vibraciones sutiles (como son llamadas las energías que emiten), que se transforman en sensaciones que la asesora siente en el corazón, o en partes de su cuerpo, o que algunas veces se convierten en imágenes que ven en su mente y las transmiten al cliente, para que este les encuentre significado y así pueda tomar decisiones acerca de su motivo de consulta.
Existen distintos modos de realizar las asesorías con ángeles, según el motivo de la consulta del cliente. Miriam, por su parte, practica una que se combina con el llamado Reiki en el que a través de la energía del terapeuta se puede ayudar a calmar el dolor físico o emocional de una persona. Esta combinación consiste en utilizar símbolos japoneses que el terapeuta hace con las manos encima del cuerpo del cliente. Este se encuentra en estado meditativo mientras el canal angélico [la asesora] empieza a decir “qué ángeles están transmitiendo mensajes y cuáles son. En mi caso me ha dicho que debo confiar y que todo estará bien”, describe Miriam mientras hace la mímica del momento y sus ojos se llenan de lágrimas.
Adriana Sierra Serrano en el lugar donde realiza sus asesorías con ángeles. Foto por: Adriana Sierra Serrano
Razones para acudir a una asesoría con ángeles
Dolly González utiliza Reiki en las sesiones con Miriam con el fin de calmar el dolor que le produce la inflamación de su columna vertebral y habla con sus células, pidiéndoles que el tratamiento funcione. Así mismo, ella busca a los ángeles cuando ya no puede soportar el caos de la ciudad y el hecho de que “no está hecha para las personas con enfermedades. Por ejemplo, subirme a un Transmilenio es terrible y eso me producía mucho estrés. Aprendí a tranquilizarme y simplemente esperar un bus en el que pueda subirme, así llegué tarde”, admite la cliente de Dolly.
Desde su experiencia personal, Adriana Sierra Serrano expone que el duelo de una relación amorosa que se termina o el abandono de la pareja cuando la mujer queda en estado de embarazo, como le sucedió a ella, son otros motivos por los cuales las personas buscan estas asesorías. Sobre el tema, ella explica que le “sirvió muchísimo”, porque le ayudó a entender para qué estaba viviendo esa experiencia y qué era lo que tenía que aprender. “En mi caso, cuando me explicaron en una dimensión diferente la situación, dejé de sentirme como una víctima y empecé a empoderarme.”, afirma Sierra.
Así mismo, Diana Bjorklund, una ciudadana española quien ha tomado asesorías con ángeles desde la plataforma de Skype, ya que para realizarlas no debe existir el contacto físico, cuenta que “no es necesario asistir a asesoría con ángeles por un asunto en específico, se puede ir solo a escuchar el mensaje que los ángeles tienen para ti en ese momento en específico de tu vida”. Para este propósito se puede acudir al ángel de la guarda ya que “este ser de luz conoce perfectamente cuáles son las decisiones que hemos tomado, cuál es la decisión que nos va a traer mayor bienestar, qué decisiones hemos tomado en nuestro pasado que de pronto en la actualidad nos está afectando”, explica Sierra Serrano.
Además, ella cuenta que “trabajar con el ángel de la guarda es muy bonito, porque lo hace muy cercano y las personas que vienen acá buscando esa guía sienten también esa familiaridad, sienten que sí les está hablando alguien que los conoce, sienten también que los están entendiendo”.
Entre las particularidades de la asesoría con ángeles
Durante este nuevo tratamiento de quimioterapia experimental que está realizando Miriam, y desde el inicio de su enfermedad, los médicos le han recomendado asistir a consultas de salud mental para su bienestar emocional. Sin embargo, ella no hace uso de estos servicios argumentando que “nunca me preguntan cómo estoy, los psiquiatras solo me recetan medicina que me hace sentir más deprimida, mientras que con la terapia con ángeles y demás prácticas espirituales que realizo sí logró fortaleza y paz interior,” comenta con el ceño fruncido.
De esta manera, resulta importante consultar al Colegio Colombiano de Psicólogos sobre su postura con respecto a estas asesorías. Gerardo Hernández, asesor jurídico del Colegio, nos hizo saber que la práctica de la psicología se rige por la Ley 1090 de 2006 en Colombia. En ella, él resalta el artículo 36, que obliga al psicólogo a “utilizar únicamente los medios diagnósticos, preventivos, de intervención y los procedimientos debidamente aceptados y reconocidos” por comunidades científicas.
“En consecuencia, mientras que no haya evidencia debidamente válida y confiable de que la ‘práctica de terapia de ángeles’ sea eficaz y ofrezca bienestar al usuario, en concordancia con el principio de la beneficencia del que habla el artículo 13 de la ley mencionada, no podrá ser avalado ni aceptado por el Colegio Colombiano de Psicólogos”, afirma Hernández.
En este sentido, el lenguaje que se utiliza en estas asesorías debe ser específico y cuidadoso. La angeóloga Sierra Serrano manifestó que “incluso en los talleres de educación sobre esta terapia, en Estados Unidos con Doreen Virtue y Charles Virtue, les advierten que deben utilizar un lenguaje específico. Este consiste en no decir paciente sino cliente, no decir que se va a curar a alguien porque el término significa que se va a emplear medicina que está guiada por la OMS. Estas restricciones se imponen porque como estas terapias no requieren un título profesional mientras que la psicología o psiquiatría sí, entonces pueden denunciarte. Pero, en Colombia no he conocido ningún caso, aquí somos más abiertos con eso”.
Sobre el mismo tema, la angeóloga Dolly González señala que es importante el término cliente ya que “brinda una comunicación horizontal en donde el cliente y los facilitadores estamos a un mismo nivel.” Ella también incluye una nueva regla del lenguaje, que consiste en no calificar su trabajo como terapia porque eso implica sanación, sino como asesorías.
Consejos para reconocer angeólogas(os)
Muchas de las angeólogas(os) se registran en la Cámara de Comercio de Bogotá como independientes y otros hacen parte de centros de bienestar donde ofrecen otros servicios como yoga. Así, es difícil encontrar una cifra de la cantidad de personas que se dedican a esto, pero para dar un aproximado, la página web de Al - kimia, una farmacia homeopática en Bogotá, maneja una lista de asesores en esta área. En ella se encuentran referenciados 30 angeólogas(os) en Bogotá y uno en cada una de otras ciudades y municipios del país, como Bucaramanga, Medellín, La Mesa, Pereira, Caldas, Manizales, Tunja y Cali.
Durante su proceso de conocimiento en el tema de la terapia de ángeles, Miriam Escobar visitó muchos centros y angeólogas(os) independientes. “Me encontré con mucho charlatán y gente que lo único que quería era plata aprovechándose de la vulnerabilidad de las personas”, señaló Escobar sobre el tema. Por eso, ella junto con Dolly González comparten estos seis consejos para encontrar un asesor y canal en el tema de los ángeles que pueda ayudar efectivamente.
- Siempre se debe confiar y prestar atención a la intuición, lo que sientes en el área de tu abdomen y el corazón, al momento de conocer la persona que ofrece este servicio. Si no da buena vibra es mejor alejarse.
- El asesor nunca debe decir que tú recuperación, sanación o bienestar depende de él o de ella o de las terapias que hagan. Un facilitador siempre tiene que hacer énfasis en la propia capacidad de decidir del cliente.
- Que el cliente no salga con más problemas que con los que entró. Cuando se sale de una sesión con un buen facilitador la persona se siente tranquila y con una sensación de que todas las respuestas están en ella.
- El asesor debe respetar lo que el cliente quiere o no hablar, así como su inconformidad con algún aspecto de la sesión. No debe ser invasivo ni abusivo.
- El facilitador nunca debe usar su nombre ni su fama, ni decir “yo soy el enviado de Dios” para que el cliente acceda a hacer algo con lo que no está de acuerdo.
- Nunca debe pedirle al cliente que compre un cuarzo o un libro o cualquier objeto al que le entregue su poder de acción y decisión.
“Si se encuentra un buen lugar se pueden hacer cosas tan increíbles como vivir feliz con una enfermedad crónica, pero teniendo en cuenta las creencias de las personas. Si crees en los ángeles esto es para ti, pero, si no, pues hay otras opciones en medicina alternativa. Si se es ateo, también hay opciones científicas. Pero no olvides saber combinarlas según sus dolencias emocionales o corporales,” reflexiona Miriam Escobar con una sonrisa en su rostro.