Desde finales del año pasado el fútbol femenino en Colombia se ha visto envuelto en varias controversias. Las jugadoras han denunciado desde falta de pagos, hasta acoso sexual. Llevan años soportando estos malos tratos, todo porque temen que su carrera profesional se vea afectado. Sin embargo, desde hace unas semanas un grupo de jugadoras han decidido alzar su voz, contar y denunciar todo lo que les ha pasado. Ya no les importa incomodar a los dirigentes del fútbol colombiano.