Esta entrevista se le realizó a Batman Roberto Camargo, uno de los organizadores de la marcha anti-taurina que se realizó el pasado 3 de abril en la Plaza de Bolívar. Camargo es vocero del comité promotor del referendo anti- taurino y uno de los fundadores de la fundación PATAS, la cual vela por el mejoramiento de la calidad de vida de los animales en abandono y fomenta su adopción responsable.
Plaza Capital: ¿Cuáles son las razones por las que el movimiento anti-taurino convocó a los ciudadanos a salir a marchar el pasado 3 de abril?
Batman Camargo: Nosotros, como comité promotor del referendo anti-taurino, decidimos realizar una manifestación con la intención de hacer que la ciudadanía recuerde que esta batalla aún no ha terminado. Las corridas de toros y el maltrato animal siguen siendo un tema recurrente en el país, por eso salimos a marchar. Vamos a seguir realizando marchas cada dos meses apoyando el referendo anti-taurino.
PC: Cuénteme qué argumentos tienen en contra de la tauromaquia
BC: En contra de la tauromaquia tenemos innumerables argumentos. El argumento principal es que el asesinar un animal en público y disfrutar de un espectáculo sangriento genera un trastorno en la ciudadanía puesto que se está enseñando a aplaudir a la tortura animal. Lo cual es inmoral.
PC: ¿Qué los llevo a retomar la iniciativa del referendo anti-taurino después del fallo a favor de los taurinos en el 2015?
BC: Nosotros, como tal, nunca detuvimos el referendo anti-taurino, solamente lo pausamos. Ahora lo que nos invita a reiniciar la lucha es que el escenario está disponible para volver al juego. El año pasado por cuestiones electorales y por la consulta anti-taurina decidimos pausarlo para no generar confusiones en la ciudadanía.
PC: ¿Cree que esta vez el referendo tendrá éxito?
BC: Estamos seguros de que el referendo va a tener un éxito rotundo porque aproximadamente el 85% de gente o es indiferente a estas actividades o las rechaza, entonces solo tenemos un 15% por ciento de taurinos en contra. Claro está que hay que tener en cuenta que nuestro referendo también pretende eliminar prácticas como: las peleas de gallos y el coleo, lo que aumenta el número de personas que están en contra de este movimiento. En pocas palabras sabemos que la lucha es pareja pero tenemos fe de que en Colombia siempre va a ganar el respeto por la vida.
PC: ¿Cree que la actual participación ciudadana en el movimiento es suficiente para lograr un cambio?
BC: La participación ciudadana es imprescindible para lograr un cambio. Nosotros necesitamos de participación ciudadana, si nosotros le dejamos esta causa y esta cuestión a decisión de los políticos nunca se logrará nada. Esto depende única y exclusivamente de que la ciudadanía exija al gobierno que se convoque a un referendo que prohíba estas prácticas. Actualmente contamos con el apoyo de muchas personas pero aun así necesitamos que más colombianos se unan a nuestra causa.
PC: ¿Qué obstáculos se les han presentado en su lucha en contra la tauromaquia?
BC: Los obstáculos que genera la lucha contra la tauromaquia son muchos, principalmente económicos y en contra de nuestra vida, continuamente tenemos desventajas en la lucha…
PC: ¿Han recibido apoyo de sectores políticos u organizaciones civiles en Bogotá?
BC: Para esta iniciativa todos los sectores políticos se han cuidado muchísimo, debido a que estos sectores únicamente apoyan o avalan a los movimientos cuando ven un logro cerca debido a la conveniencia que esto les genera. Por ahora, como el referendo va en primera etapa, el único apoyo que se tiene es de activistas que están apoyando la iniciativa. Aproximadamente 6.000 personas están trabajando en ella de una a otra manera. Esperamos que una vez nos constituyamos como comité promotor del referendo anti- taurino empecemos a recibir apoyo por parte de algunas otras organizaciones.
PC: ¿Han recibido apoyo por parte del actual gobierno distrital?
BC: El apoyo es nulo y más con este nuevo gobierno.
El movimiento anti-taurino se enfrenta contra los crímenes legalizados que, según ellos, se llevan a cabo en las plazas de toros. Camargo afirma que las corridas de toros son lugares en los que se aplaude la tortura y el sufrimiento de los animales quienes participan de manera involuntaria en los espectáculos, atentando así en contra del bienestar de los mismos.