El pasado domingo 17 de febrero se realizó una 'sembratón' en la localidad de Rafael Uribe Uribe, en el sur de Bogotá. Esta actividad que tuvo como objetivo plantar árboles para ayudar a mejorar la calidad del aire en la capital de la República. 

En el evento se sembraron cerca 200 árboles. Los participantes igualmente recogieron basura y escombros en los alrededores del Parque Metropolitano Bosque de San Carlos.

Los 200 árboles que se sembraron hacen parte de los 500 que fueron donados por Agua Siembra, una microempresa con un enfoque de sostenibilidad ambiental. El restante será destinado para nuevas ‘sembratones’ en diferentes localidades del sur de la ciudad como Kennedy, Puente Aranda y Engativá.

El colectivo ciudadano 'Neopolitanos' -que convocó a la 'sembratón'- anunció que presentará una acción de tutela para que se declare al aire de Bogotá como sujeto de derechos. Para esto realizarán el miércoles 20 de febrero un plantó frente a la Corte Constitucional para que seleccione y revise la acción judicial.

Este movimiento ciudadano tiene como objetivo apropiarse de los espacios públicos abandonados por el distrito y enviar un mensaje contra la tala de árboles que se ha realizado en los últimos años en la ciudad.

A la ‘sembratón’ asistieron ciudadanos de todas las edades y localidades, desde niños de cinco años hasta adultos mayores de localidades como Chapinero, Rafael Uribe Uribe, Chicó y Usaquén.

Y es que la polémica por la tala de árboles en la capital ha llegado a instancias judiciales, tanto así que la Procuraduría General abrió una investigación preliminar en contra de varios funcionarios del Distrito por las obras que se adelantaron en el Parque Japón ubicado en la localidad de Chapinero.

Esta decisión se toma después que la Alcaldía Mayor de Bogotá diera luz verde para continuar con la construcción de una cancha de fútbol sintético en este parque a pesar que un juez de la República ordenara su suspensión..

La Alcaldía Mayor de Bogotá ha defendido su posición señalando que desde el 2016 se han realizado 14.076 talas por deterioro o por riesgo para los ciudadanos. Sin embargo, estos argumentos no han sido compartidos por la mayoría de bogotanos y expertos en la materia.

Para Camilo Salcedo, uno de los asistentes a la propuesta del movimiento ciudadano, es una iniciativa muy importante porque Bogotá es una ciudad que sufre una crisis ambiental y los árboles dan la posibilidad de respirar un mejor aire.

Dificultades por falta de permisos

Las autoridades de Bogotá declararon el pasado jueves 14 de febrero la alerta amarilla por contaminación en todo el territorio, y alerta naranja en el suroccidente de la capital. Para esto, estudiaron la calidad del aire que se mide en cifras, de 0 a 50 es la magnitud ideal, pero en algunas localidades de la ciudad llega a 162, es decir, mala condición y gran contaminación.

A pesar de las buenas intenciones de los ciudadanos, al momento de llegar al Parque Metropolitano Bosque de San Carlos se les prohibió sembrar los árboles, pues no les dieron permiso a pesar de insistir durante dos meses para que se les concediera. Sin embargo, esto no fue suficiente para impedir que se llevara a cabo el evento, Neopolitanos y los bogotanos encontraron otro lugar en un parque aledaño que ahora cuenta con 200 árboles nuevos.

Juan Diego Medina, integrante de 'Neopolitanos', aseguró ante esta situación: "no nos vamos a quedar callados mientras nuestra ciudad se ahoga en un aire contaminado".

El colectivo planea organizar diversas ‘sembratones’ en diferentes localidades del sur de la ciudad como Engativá, Kennedy y Puente Aranda, donde se espera que más ciudadanos participen.