Chris Hernández cursa sexto semestre de Diseño de Modas en la Corporación Escuela de Artes y Letras en donde ha trabajado los temas de sexualidad y género en la mayoría de sus proyectos. Hace parte de Fovea, un colectivo de fotografía que integra el arte y la moda con los espectros de género y sexualidad.
En diálogo con Plaza Capital se refirió a la fotografía, a su tránsito como mujer transgénero, a la marca que creó y a sus inspiraciones a la hora de diseñar.
Chris Hernández cursa sexto semestre de Diseño de Modas en la Corporación Escuela de Artes y Letras en donde ha trabajado los temas de sexualidad y género en la mayoría de sus proyectos. Hace parte de Fovea, un colectivo de fotografía que integra el arte y la moda con los espectros de género y sexualidad.
En diálogo con Plaza Capital se refirió a la fotografía, a su tránsito como mujer transgénero, a la marca que creó y a sus inspiraciones a la hora de diseñar.
¿Cuándo decidió que lo suyo era el diseño de modas?
Inicialmente mi proyecto de vida nace hace dos o tres años, cuando inicio mi tránsito. Soy una mujer transgénero hace dos años. Solía llamarme Christian Camilo Gutiérrez Hernández, y pues por toda la idea del tránsito, de querer hacer algo distinto y de pronto poder cambiar de vida, llegué al diseño de modas. Ya estoy en sexto semestre de esta carrera y ya me considero a mí misma, una diseñadora. De ahí nace mi marca, constituida como marca personal. La quise crear como Chris Hernández, que nace más de una parte personal y de querer mostrar que las personas trans somos distintas. No nos quedamos en los mismos estereotipos como la peluquería, ser sexo servidoras o la prostitución.
¿Qué es Chris Hernández?
Mi marca soy yo, donde uno el arte y la moda en un solo concepto. Los diseñadores ahora están muy enfocados en hacer vestidos y plasmar todo en una pasarela, pero no está la idea de moda en una galería de arte que también es muy necesaria. Además, la moda es la proyección que tiene el ser humano y como tú te defines como persona, eso es la moda. Es cómo tú te comunicas con los otros. Entonces, no solo es una pasarela y creo que eso también le hace falta a la moda, donde podamos comunicarnos nosotros mismos. Entonces, ¿qué es mi marca? Soy yo solita y es una exploración de toda la comunicación por medio de la moda y el arte.
¿Cómo integra las distintas expresiones de género dentro de lo que es su marca?
Lo que quiero y lo que siempre ha sido nuestra meta es proyectar que inicialmente hay seres humanos; es decir, hay personas sin género: ni hombre, ni mujer. Se trata de lo que cada persona construya de sí mismo y lo que quiera proyectar. En las fotografías, que es el último trabajo que hicimos, fue eso: buscamos personas que estuvieran en un género intermedio y que proyectaran lo que ellos quisieran. Entonces, había chicos, hombres que son “hombres” en la sociedad, pero se comunican por medio de las cosas femeninas como faldas, maquillaje. Eso era lo que potencializábamos en las fotografía, o también mujeres que son “mujeres” dentro de la sociedad, pero son niñas que muestran poder.
En cuanto a la constitución de su marca, ¿qué tropiezos o altibajos ha encontrado en el camino?
En un momento pensé que el hecho de ser una chica trans iba a ser un tropiezo. Cuando ingresé a la convocatoria del BCapital, pensé que eso iba a ser un tropiezo y no. Mira que cuando llamaron, porque en mis papeles dice que legalmente soy Cristian Camilo Gutiérrez Hernández, llamaron a Cristian Camilo Gutiérrez Hernández y pasó una señorita de 1,80 metros en minifalda. Yo entendí que esa parte que yo pensaba iba a ser un tropiezo, eran mis cinco minutos donde las personas iban a centrar la atención en mí y en mi proyecto. Dependía de mí si lo hacía valer o no. Entonces creo que todo esto depende de uno, más cuando va a presentar su proyecto independientemente de lo que sea y tenerle fe a ello.
Dentro del mercado de la moda, ¿cómo ha sido ser una persona trans?
Para mí, mi transito ha sido muy bonito porque yo no me he tenido que ver envuelta en respuestas como “es que por ser trans, mejor no”. Como que el hecho de ser trans en este momento me está abriendo las puertas. No lo veo como algo de sentirme victimizada, sino todo lo contrario. Es algo a lo que le agradezco profundamente, por todo lo que me está dando en este momento, porque es lo que me está impulsando de cierta manera. El hecho de ser trans no es que sea como el ítem más grande mío, sino es como algo más a lo que en este momento le estoy sacando frutos.
¿Qué inspiración dentro de la academia de los estudios sexuales y de género ha tenido?
Dentro de la institución siempre nos hacen talleres rápidos o talleres de final de semestre. Mis talleres siempre son enfocados en el género, en la sexualidad o de pronto en mi vida propia, en lo que quiero proyectar. Las chicas trans sencillamente somos unas personas comunes y corrientes que tomamos la decisión de construirnos a nosotras mismas. Entonces, eso es lo que siempre trato de plasmar en mis proyectos: que la decisión fue mía, yo la vivo como yo quiera y la expreso como yo quiera. Eso no está mal.
¿Qué es Fovea?
Para el BCapital me uní con una empresa y hacemos un colectivo que se llama Fovea Producciones. Somos tres amigos trabajando en esto, uniendo el arte y la moda en un concepto. Hacemos todo lo que es fotografía de moda y yo llego a ellos también a crear ese concepto de arte y de moda porque no lo hay.
¿Por qué usar la moda como forma de expresar lo que uno es?
Creo que la moda en sí es todo lo que envuelve un ser humano. Cuando tú estás triste, usas una chaqueta grande y un pantalón y no te quieres arreglar. Pero el día que te quieres sentir linda te pones un vestido apretado y es la forma de comunicarte. La moda es eso, es como la forma de explotarte y de explorarte a ti misma. Entonces creo que la moda es ese ítem importante que tiene el ser humano para expresarse. Es eso, la moda te da ese poder de explorarte a ti misma y de decir esto es lo que soy yo.
¿En qué eventos o concursos ha podido mostrar sus diseños?
He participado en varios concursos de modas. Por ejemplo, el año pasado estuve en Ibagué, en el evento Maquila y Moda y quedé en los cinco mejores diseñadores de Bogotá. También he participado en concursos de Basura Cero de Bogotá, donde diseñamos vestidos ecológicos con materiales reciclables y reutilizables. También estuve en pasarela con Bogotá Basura Cero el año pasado.
¿Qué consejo o recomendación les daría a las mujeres transgénero que tienen esta pasión por la moda pero tienen miedo de explorarla?
Primero explórense ustedes mismos o mismas, si en serio quieren ser una mujer. No todas pueden con esto, no pueden con el señalamiento de la sociedad. A mí no me ha tocado mucho, pues de pronto sí hay gente que me mira o no, pero es muy difícil. En cuanto a la decisión de la moda, es la parte donde uno puede desenvolverse totalmente. Cuando yo inicié me decían “¿bueno y por qué siendo una chica trans no es abogada o administradora? ¿Por qué se mete a coser?” Sencillamente la moda es eso: puedo unir todo lo que yo quiero y todas mis pasiones.