De un momento a otro nos convertimos en grafiteros

Martes, 03 Septiembre 2013 08:27
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Para el cumpleaños 475 de Bogotá, IDARTES realizó una convocatoria de artistas urbanos para intervenir los muros de la calle 26. Esta convocatoria fue dirigida a artistas con una experiencia mínima de 3 años en la realización de intervenciones murales, un portafolio impecable con gran diversidad de muestras artísticas fueron algunos de los requerimientos exigidos para los colectivos aspirantes.

Colectivo Bicromo.||| Colectivo Bicromo.||| Foto: Diego F. Flórez Carvajal|||
1947

BICROMO, un colectivo artístico bogotano, fue uno de los grupos seleccionados para esta convocatoria, compitieron con más de diez grupos. En el proceso de selección  IDARTES exigió la experiencia en calidad artística reflejada en murales con diseños de gran formato y medio formato.

Tres artistas plásticos, Ángela Atuesta, egresada de la Universidad de los Andes, Jenaro González y Nicolás Parra, graduados de la Universidad Nacional, son el colectivo artístico BICROMO quienes a través de su técnica artística de pintura en mural lograron hacer parte de esta convocatoria.

Sus inicios como recién egresados radicaban en ser maquilladores, titiriteros, animadores digitales en una ópera y meseros. Sin embargo, el bagaje académico aportado por sus universidades y la inclusión social en sus visiones como pintores fueron una gran ventaja para ser seleccionados por IDARTES.

Una oferta que contaba con procesos administrativos y burocráticos más allá de la pintura, algo ajeno a su acostumbrada zona de confort, asumiendo conflictos internos del lugar y dejando el almuerzo para después, fue parte de esta vivencia, “una propuesta de locos” comentó Ángela.

Ha habido muchas experiencias que son parte de su formación integral como artistas; la participación en el centro de convenciones de la cumbre de las Américas en Cartagena, la intervención de murales pintados no remunerados, presupuestos inalcanzables y trabajos ajenos a su profesión, es parte de este recorrido profesional que ha tenido que vivir BICROMO.

El juego con la pintura y la inspiración del momento hacen parte de la técnica que ofrece este grupo artístico, que en sí, encuentra en su nombre una dualidad de todo lo existente en el universo “algo similar al ying yang” afirmó Jenaro.

“Uno no vive de agua molida y viento raspado” es el lema que sigue este colectivo artístico para lo que viene de ahora en adelante; BICROMO vive de la continua construcción de la profesionalidad, siendo mejores en la práctica con la mayor humildad posible, “pues al final del día, son los muros los que hablan por sí mismos, ellos dan la pauta para crecer más” afirmó Nicolás.