El predio donde se encuentra ubicado el parque La Paz, en la localidad de Kennedy, pasará a ser un colegio distrital. Se trata de una obra que ha despertado la oposición de algunos de los residentes de la zona, quienes continúan protestando para frenar la construcción.

El proyecto, que según la Secretaría de Educación de Bogotá beneficiaria a 1.060 niñas, niños y jóvenes de la zona, no fue dado a conocer con anticipación a la comunidad y generó discordia entre los habitantes del barrio.  Desde el 21 de enero de 2023, trabajadores de la obra y representantes de la Secretaría llegaron al terreno a la 1 de la mañana con maquinaria e instrumentos de construcción. Ante este hecho, diferentes altercados entre la comunidad y la fuerza pública se han venido presentando. 

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Después de diálogos y reuniones con la Alcaldía Mayor de Bogotá y la Secretaría de Educación, no se ha llega a un consenso con los habitantes. Se reclama que a la fecha se han talado más de 15 árboles, no hay protección a la fauna y flora del parque y hay más de 13 denuncias contra la fuerza pública por agresiones a mujeres que se encontraban manifestándose.  

El debate entre las partes 

El colegio se construiría en medio de dos edificaciones residenciales que podrían verse afectadas por el uso constante de la maquinaria. Como lo indica Luz Ángela Gonzales, perteneciente a la comunidad de mujeres que luchan por el parque La paz, “tenemos desde gestión de riesgo un gran peligro porque esta construcción vulnera el edificio que está atrás, ya está evidenciado que tuvieron un desprendimiento de fachada con una obra muy pequeña”.  

Así mismo, la comunidad destaca que el parque La Paz es una zona verde importante, hábitat de aves migratorias y locales, que permite la recreación y el esparcimiento. Según la Secretaría de Ambiente, Kennedy se encuentra entre las localidades con más contaminación, razón por la que los vecinos del barrio sienten que la construcción del colegio distrital afectaría al medio ambiente aún más al talar estos árboles.  Además, se trata de un espacio que funciona como punto de encuentro en un momento de evacuación.  

Los habitantes del barrio afirman que no están en contra del derecho a la educación, solo consideran que no es necesario un segundo colegio distrital en el mismo barrio. “No nos oponemos a la construcción de un colegio, pero este no ha sido concertado con la comunidad de la UPZ 113 de Bavaria. Pedimos que se hagan los colegios donde está la demanda educativa”, dice la abogada Alexandra Leal, fiscal de la Junta de Acción Comunal de Marsella.  

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De acuerdo con el directorio de colegios del Ministerio de Educación Nacional, que se encuentran registrados en el Sistema de Matriculas Estudiantil (SIMAT), las UPZ Tintal norte, Corabastos y Margaritas son las que tienen más déficit de colegios tanto públicos como privados en la localidad de Kennedy. 

Por otro lado, la construcción del colegio es un proyecto que ha involucrado tres administraciones. Comenzó en la alcaldía de Gustavo Petro, donde se entregó el lote del parque La Paz a la Secretaría de Educación. Continuó en la administración de Enrique Peñalosa y la alcaldía actual otorgó la licencia de construcción, lo que le permitió al contratista avanzar con la obra. 

En la Encuesta Multipropósito 2021 del DANE, se encontró que, “de los niños de 5 a 16 años que residen en las UPZ de Bavaria y Castilla, cerca de 1.432 no asisten a ningún establecimiento educativo, entre otras razones porque no tienen cupo cerca a su lugar de residencia”. El colegio La Paz les permitiría acceder a educación de calidad cerca a sus viviendas.  

¿Se construirá el colegio? 

Actualmente, el contratista consorcio La Paz, encargado de la construcción del colegio, se encuentra realizando labores de remoción de tierra y tala de árboles. Las cinco acciones de tutela interpuestas por la comunidad de Marsella obtuvieron como respuesta fallos a favor de la Secretaría de Educación. Sin embargo, los residentes instauraron una acción popular con medida cautelar en el Juzgado Trece Administrativo de Bogotá, exigiendo que se frenaran las labores por parte de la constructora.  

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El pasado 27 de febrero la medida cautelar fue rechazada, lo que le da la completa libertad a los contratistas de llevar a cabo la construcción del colegio. A pesar de que la Secretaría de Educación ha intentado conciliar con la comunidad, no ha sido posible. Se siguen presentando algunos encuentros pacíficos por parte de los vecinos y muestras artísticas alrededor del parque en oposición a su construcción.