Los indignados por la muerte de Príncipe, el perro criollo que recibió un disparo del motociclista Juan Sebastián Toro, se movilizaron en el Parque Nacional para promover una campaña que exija al Congreso la inclusión de una ley para la protección de los animales.

La marcha inició a las once de la mañana, se trasladó por la Séptima y terminó en el Museo Nacional. Contó con la participación de aproximadamente 50 personas acompañadas de Josefina Daza, líder de la iniciativa; Marina Isaza, dueña de Príncipe y Arturo Isaza, presente en la discusión con Toro y responsable de la mascota en el momento.

Según Josefina Daza, la impunidad que genera la muerte de un animal a manos de un inadaptado motiva nuevas movilizaciones y aumenta la necesidad de recoger firmas simbólicas, que puedan ser capitalizadas y llevadas al Congreso por medio de representantes como Juan Carlos Losada.

En la movilización se rindió homenaje a Príncipe con carteles, bombas blancas y negras, reflejo de sus manchas, y flores; también se gritaron frases de protesta y se dio a conocer la campaña de las firmas entre los asistentes. Al terminar el recorrido, todos compartieron un momento con sus mascotas y recordaron la compañía, solidaridad y amor que les brindan.

Marina Isaza, asegura que esta convocatoria es hasta ahora el primer paso para el proyecto de ley, pues las únicas sanciones que existen son económicas y no superan los 700 mil pesos. Afirma que "necesitamos que protejan a nuestros muchachos, porque lo único que tienen por el momento es nuestra voz" y expresa no tener intención de tener otra mascota por el momento.

Para la abogada Karen Muñoz, la 'Ley Príncipe' se opone a las medidas anteriormente dictadas por la Corte Constitucional, como el regreso de las corridas de toros a Bogotá. Muñoz dijo que si se logra legislar la iniciativa por los derechos de los animales, la definición del término 'animal' sería limitada y la ley crearía conflicto en los ciudadanos que defienden a todos los animales, no solo a los domésticos.

En Colombia, la Asociación Defensora de Animales y del Ambiente (ADA) en unión con la policía ambiental, trabajan para proteger a los animales.