Este es un evento organizado por la Federación Nacional de Cafeteros (FNC) y la marca Café de Colombia, 36 baristas de todo el país compiten por representarnos en el Word Brewers Cup 2020 en Australia durante el mes de mayo. Para todos los que no saben, un filtrado es la preparación de una bebida de café realizado en un método de preparación manual.

Fotografía por Juan Sebastián Quintero

Andrés Elizalde, juez líder de las Competencias Nacionales de Café, explicó que los jueces pertenecen a alguna etapa de la producción o del procesamiento del café y además tienen experiencia de otras competencias. Cada barista es juzgado por tres jueces sensoriales y un juez lider, así mismo hay tres equipos que se rotan para evitar que saturen sus sentidos y que no sesguen su opinión. El grupo de 16 jueces se divide en dos, uno que se encargan de un servicio abierto, es decir, una presentación en la que el barista demuestra sus habilidades en la barra de café y es evaluado por el sabor, el conocimiento sobre el café que decidió utilizar y su trabajo en general. El otro grupo está en el servicio cerrado en el que con un único café para todos los participantes de la competencia los jueces realizan una cata a ciegas en el que dan un concepto sensorial de cada taza preparada.

Fotografía por Sophia Salamanca Gómez

En esta oportunidad son 15 jueces nacionales y un juez internacional, en el que “solo pueden juzgar quienes superaron las pruebas de calibraciones realizadas por la juez internacional” que es Silvia Gutierrez de México, representante del World Coffee Events. Silvia se encarga de verificar que todas las especificaciones reglamentarias estén cubiertas para elegir al barista más hábil en igualdad de condiciones y además capacito a los jueces calibrándolos para que su criterio sea similar a la hora de calificar a los baristas. Estas competencias en su opinión ayudan tanto a los tostadores como productores, que fomentan la mejora de calidades, conocer más allá de la producción y saber cómo el consumidor ahora quiere el café.

La calibración en palabras de Elizalde “es un proceso en donde los jueces muestran sus conocimientos sobre la reglamentación internacional, prueban cafés, se califican y se estandarizan los conceptos de los jueces sobre el mismo garantizando parámetros de equidad para evaluar”. Aún así con su experiencia en otros países la mexicana cuenta que “en Colombia no necesitan importar cafés de otros lados para demostrar la excelencia” y que se siente en un lugar privilegiado por poder probarlos aquí mismo.

Fotografía de Sophia Salamanca Gómez

Esta competencia está patrocinada por marcas e instituciones como el Parque del Café, el Comité Departamental de Cafeteros del Quindío, Café La Morelia, Café Jesús Martín, Amor Perfecto, Juan Valdez, y entre ellos está Ktarte. Daniel Rendón su propietario cuenta como marca de tiendas de cafés especiales, de alta calidad, y patrocinador de este evento busca aportar un crecimiento a la cultura cafetera, las buenas prácticas de preparación y educación al consumidor. Él tiene claro que es vital impulsar estos eventos ya que “si la cultura crece, el crecimiento de las ventas lo hace también”. No cuestiona a Colombia el ser reconocido a nivel mundial por excelentes cafés, sino por “¿qué tanto de ese café se consume dentro del país?”. Dice que el panorama es positivo a nivel local porque hay un desarrollo y se mantiene a nivel internacional, pero es importante que nos apropiemos de él.