Colombia tiene en marcha la creación de una política de drogas que contemple la prevención, el cuidado en términos de salud pública, respeto de las libertades y una ola de oportunidades laborales y económicas. Esto se traduce, para los expertos, en una apuesta que promete a futuro poner fin a una guerra incesante contra el narcotráfico y la criminalidad derivada del comercio de estas sustancias. A la vez,  desde distintos sectores se hace un llamado al cambio de perspectiva prohibitiva y sancionatoria que invite a entender los beneficios que trae consigo la regulación de psicoactivos como la marihuana.  

“Hoy para el mundo, el país es sinónimo de carteles de droga y criminalidad”, comenta el representante a la Cámara y ponente del proyecto de ley por el Pacto Histórico Alejandro Ocampo, en conversación con Plaza capital. El congresista cuenta sobre los retos que supone proponer un proyecto de ley  en el que aparte de regularizar el consumo recreativo de cannabis, también permita comercializar, generando una competencia al narcotráfico y a los grupos criminales que desde hace mucho tiempo se han asentado en el país. 

“Ahora bien, la parte más difícil del proyecto de ley es poder comercializar, por que se va a competir con el narcotráfico. Es quitarle al narcotráfico y a los grupos criminales lo que han tenido por años y decirles que van a tener que pagar impuestos, porque la marihuana ahora se va a vender en sitios legales. Ya no va a ser un tema de criminales si no de empresarios y comerciantes, personas que vienen de un negocio legal en el que ya no hay un marco de delito. Dejar a esa otra gente criminal va a ser difícil pero no imposible”, puntualiza el congresista.

La iniciativa se aprobó en sexto debate en la cámara de representantes el pasado 9 de mayo de este año. Su autor, Juan Carlos Lozada, representante a la Cámara por el Partido Liberal dice que espera que se establezcan las condiciones para la comercialización de la marihuana de uso adulto en Colombia.  

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Los retos del proyecto de ley  

Para Ocampo, los puntos más difíciles y urgentes que se deben tener en cuenta a la hora de proponer el proyecto de ley es que, por ejemplo,“ una parte de la sociedad comprenda que la marihuana es menos dañina que el cigarrillo y menos dañina que el alcohol, y que produce menos muertes que el mismo alcohol ”.El congresista del Pacto Histórico dice que desmitificar es uno de las cosas más difíciles del proceso porque, según él, la gente que no es usuaria tiene otros conceptos del psicoactivo de las cosas más difíciles del proceso porque, según él, la gente que no es usuaria tiene otros conceptos, y no entienden lo que en realidad sucede con el cannabis más allá de su uso recreativo . 

Otro de los retos, “ es que se logre que el 50% de los impuestos que genera el cannabis los dejen utilizar en recuperación de habitantes de calle”. Según Ocampo, el  Estado nunca ha hecho nada por ellos, y esta tarea sólo es posible, tomando un presupuesto específico. 

Para él, esta es una de las tantas mociones difíciles de consensuar en el Congreso, pero de importante atención además de la idea de que el Estado invierta en industrialización para este sector,“porque aún no se entiende que a partir de ciertos derivados del cannabis, como el cáñamo, se pueden generar  otros productos como zapatos y camisas”.  

Dentro  de las apreciaciones finales del ponente, se resalta la constante preocupación que hay  en torno a la producción campesina ancestral de cannabis. Según el,si se llegara a aprobar el proyecto de Ley,sería inevitable encontrarse con casos en los que las multinacionales quieran apropiarse de los cultivos de mayorías étnicas y, campesinas que siempre han cultivado, lo que supone más desafíos para el Estado.  

“Estamos trabajando para dejar una ley bien hecha, con la que  a partir de sus propósitos pueda acabar con el negocio del narcotráfico, pueda acabar con la violencia en las zonas campesinas y alejadas, y provea de forma integral derechos a los usuarios, recaudando a la vez dinero. Es construir una economía legal en los sitios de distribución y que se pueda sustituir coca por marihuana. Claro, habrán otras cosas  difíciles de hacer como el acuerdo internacional, porque el cannabis no se puede exportar porque si, si no se tiene una prohibición, una convención. Pero de eso se trata, de realizar   un proyecto de ley que le apunte a generar una gran economía nacional  y que muchos puedan vivir de esto ”, puntualiza el congresista. 

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Las ventajas en el proceso de regulación de cannabis

En entrevista con Plaza Capital, el doctor Pablo Zuleta, actual director e investigador del área de Consumo de Drogas, Salud Pública y Educación del Centro de Estudios sobre Seguridad y Drogas (CESED) asegura que algunos de los beneficios y riesgos que hay que tener en cuenta  una vez se regularice el  consumo de cannabis de uso adulto en Colombia es que “Entre más control e información se tenga del tipo de producto que se consume, la exposición a un consumo problemático disminuirá. Esto conllevara un proceso de adaptación cultural lento, en el que no hay que esperar a que estén los usos de la marihuana legalizados, sino entender que los actuales tienen riesgos.”

Ocampo agrega  que es  la industria del cannabis medicinal, donde más beneficios  pueden encontrarse y que no puede desaparecer “porque el país también tiene que darse cuenta que hay un mercado importante, que ha mostrado beneficios para ciertas patologías y que en Colombia no se están formulando y ahora es el momento ”.  

¿Para qué patologías sirve el cannabis medicinal? 

Según el experto, componentes como el THC (tetrahidrocannabinol, principal constituyente psicoactivo del cannabis) o el CBD, sirven en función de sus propiedades medicinales para ser una sustancia terapéutica influyente en algunas enfermedades como la esclerosis múltiple, y en otros casos más específicos, para tratar enfermedades asociadas a la psicosis. 

Para indagar por los procesos de calidad, investigación médica y genética, Plaza Capital consultó a uno de los fundadores de una empresa que convierte el cannabis en productos cosmetológicos. Según él, los beneficios que se pueden extraer del uso de esta planta son numerosos, pero que con la actual legislación Colombiana,“ se ven  muy restringidos, porque, asegura, entidades como el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) simplemente dentro de su marco de regulación no lo permiten. Además,  Los usos que nosotros le damos al cannabis comienzan desde la preparación y distribución de pomadas, ungüentos, gotas, lociones, y hasta hidratante de labios”

El empresario puntualiza en la idea de que si bien los productos no son medicinales es justamente porque el gobierno no lo permite. 

“El INVIMA,  dentro de sus regulaciones, no lo permite. Entonces, si tú vas a esa entidad a registrar tus productos, ellos te van a decir  que el único registro que te dan es para productos de cannabis con fines cosmetológicos. Entonces proceden a darte una notificación sanitaria como producto cosmetológico y eso es todo”.

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Los riesgos 

Para el experto Pablo Zuleta, los riesgos de la marihuana radican esencialmente en el desconocimiento que se tiene sobre las sustancias que se consumen.

Zuleta dice que la percepción del riesgo disminuye, cuando se estima, por ejemplo, que todas las sustancias cuentan con un alto contenido de cannabidiol que no es tan  perjudicial para la salud ,cuando en realidad, son más los riesgos. 

“Nosotros en el CESED hemos hecho cierto tipo de investigaciones que están basadas en evaluaciones del consumo problemático, y esas poblaciones de consumo  están en centros de rehabilitación. En Bogotá, el 20%  de la población que entra en  un programa de rehabilitación es por consumo de marihuana, luego le sigue el bazuco con un 49% .Otro de los posibles riesgos es el de psicosis, paranoia y a largo plazo sufrir de problemas cardiovasculares” precisa el experto.

En suma, para los expertos la regularización del cannabis en el país dependerá de una legislación bien hecha, que hable de los contenidos de la sustancia, y que también se reconozcan responsablemente los riesgos y posibles beneficios de la planta.