Un paciente de VIH que antes pagaba entre $1.000.000 hasta $2.000.000 por su tratamiento, con la adopción de esta medida, pagará entre $700.000 y $1.200.000, según lo dicho por el gobierno. Sin embargo, personas vinculadas con las enfermedades de alto costo manifestaron que esto no es así.

De acuerdo con Néstor Álvarez, director de la Asociación de Usuarios de Alto Costo de la Nueva EPS, esta medida no se sentirá en el bolsillo de los ciudadanos del mismo modo en el que el gobierno nacional se verá beneficiado. “Habrá más dinero para dar una mayor cobertura y un mejor servicio en el área de la salud, por parte de las EPS y del POS. Es decir, ya no habrá excusa de estas entidades para decir que no hay medicamentos disponibles”. Así mismo dijo que esta medida no beneficiará a los colombianos que no tengan acceso a seguridad social. En este caso, es el gobierno el encargado de velar por la salud de dichos ciudadanos, según lo dicho por Álvarez.

Por su parte Luis Méndez, Director de la Unidad de Negocios de la multinacional farmacéutica Genzyme Corporation, cuyo medicamento cerezyme está incluido en la lista de los medicamentos de alto costo y que es indispensable para tratar la enfermedad de tipo genético, manifestó que esta medida tendrá consecuencias para el sector farmacéutico. “Como se reducirán los costos de los medicamentos, se reducirán las cifras de ventas de las compañías”. Según Méndez, esto significaría que algunas multinacionales vinculadas al mercado de medicamentos de alto costo, consideren descontinuar algunos de sus productos debido a una reducción de la rentabilidad en el negocio.

Mientras que Claudia Camacho, paciente de Cáncer y por tanto de los medicamentos de alto costo, afirmó que la medida no beneficiará a los pacientes. “Así sean del POS o no, a uno le tienen que dar el medicamento así sea por tutela. Pero uno no saca un peso del bolsillo” afirmó. Del mismo modo dijo que los principales beneficiados con la medida son las EPS y el FOSYGA.

En cuanto la implementación de esta medida, Néstor Álvarez manifestó que “desde hace ocho años, en Colombia los medicamentos son más caros que en otros lados del mundo. El gobierno se estaba demorando con esta decisión. Tiene que existir una política de reducción y de control del precio de los medicamentos en el país, así no sean de alto costo y sean genéricos. No se debe salvar ni la aspirina”.