De esta forma, el día 8 de febrero se dio inicio al retorno a clases de los colegios privados y jardines de Bogotá los cuales cumplen con el aval de la Secretaría de Educación y de Salud al efectuar las normas básicas de bioseguridad, tales como: lavado constante de manos, distanciamiento social, uso de tapabocas y aforo limitado en los salones y rutas escolares. Asimismo, las instituciones deberán tener en cuenta que el personal docente y administrativo debe tener entre 18 y 59 años, las jornadas no podrán superar las cuatro horas y se debe crear un comité de contingencia que gestione las medidas a tomar teniendo en cuenta las condiciones del entorno.
Según la Secretaría de Educación los colegios tendrán la disponibilidad de determinar el aforo acorde con el tamaño que disponen en sus salones, cafeterías, patios de recreo, laboratorios y demás espacios. Es por esto que aún no hay claridad sobre cuántos de los casi 800 mil estudiantes del distrito han retornado. No obstante, para el regreso seguro de los estudiantes con lo primero que las instituciones deben contar es con el aval de los padres de familia. “Los padres de familia deben establecer un consentimiento informado o la autorización del retorno”, le dijo a Plaza Capital Ricardo Sánchez, rector del colegio Gimnasio Los Arrayanes Bilingüe.
La decisión obedece a que si bien se ha determinado que los riesgos de contagio en la población infantil son mínimos la institución y los padres de familia deben encargarse de la aplicación rigurosa de las medidas establecidas por el distrito.
¿Es seguro que los estudiantes regresen a las aulas?
Según varios estudios la alternancia es uno de los métodos más efectivos para que los estudiantes aprendan más y se terminen de desarrollar cognitiva y emocionalmente, es por esto que la alcaldía expidió un documento donde se le pide a los colegios tener prioridad en el retorno a clases con aquellos alumnos que sean menores de 10 años y a los que tengan dificultades de conexión o no cuenten con dispositivos tecnológicos para acceder a sus clases.
Según Sánchez se debe priorizar el regreso a clases pues “la afectación que está teniendo el Covid-19 en los estudiantes está generando que no solo se refleje en la productividad (...) sino también en la socialización con sus pares que requieren los niños (...) y como también las enfermedades de carácter físico, tales como obesidad o problemas de columna”. Además, se debe tener en cuenta que las medidas tomadas por el Ministerio de Educación y de Salud también han sido ocupadas por los diferentes países de América Latina y Caribe con el apoyo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) pues según su testimonio la pandemia ha amenazado los derechos de los niños a la educación, la protección y el bienestar. Haciendo que se corra el riesgo de que entre más tiempo permanezcan los estudiantes lejos de las aulas, mayor será es el riesgo de que nunca regresen.
Contradictores de la medida insisten en posible nuevo pico de la pandemia
Uno de los sectores que más se ha opuesto al retorno de la alternancia es la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) la cual cree que no es momento de regresar a clases debido a que consideran que es muy pronto. Pues, el pico de la pandemia aún no se ha reducido lo suficiente y, según sus estimaciones, el retorno a clases puede provocar que los niveles de ocupación de las camas UCI vuelvan a incrementarse. Aun cuando esta asociación ha intentado impedir la reapertura, la alcaldesa Claudia López está lista para que todas las instituciones entren en el plan de reapertura gradual, progresivo y seguro con las medidas establecidas por la Secretaría de Salud.