En el actual mundo de Internet, en donde la audiencia pasa a ser productora de contenidos, surge un fenómeno audiovisual conocido como vídeos virales que empieza a ser parte de distintas campañas publicitarias. Este se ha convertido en una forma de entretenimiento para los usuarios de las redes sociales.
José Alejandro Méndez, comunicador audiovisual egresado de la Universidad de la Sabana, define vídeo viral como: “piezas audiovisuales que generan una recordación en el público, ya que su estructura está basada en causar que el contenido se repita una y otra vez”.
Estos vídeos se caracterizan por ser dinámicos y cortos. Contienen textos muy breves, para así garantizar su claridad, concinidad y contundencia. La música es fundamental, “es un valor indispensable ya que es la herramienta que primero llega al cerebro y es el primer punto de recordación,” dice José Méndez. A través de redes sociales como YouTube, Vimeo, Facebook y Twitter, los usuarios pueden ser tanto productores como consumidores de estos vídeos.
Ningún realizador de estos vídeos tiene la certeza de que su producto va a ser viral y será difundido en las redes, ya que estos son impredecibles. “El sinónimo de un vídeo viral es la sorpresa. El espectador siempre va a esperar algo, y ese algo es lo que hará que la pieza se vuelva viral, o quede sólo como un vídeo más en la Internet,” afirma José Méndez.
A lo largo del 2013 algunos vídeos virales han llegado a la fama de manera impredecible, debido a la difusión masiva de estos en las distintas redes sociales. Este es el caso del “Harlem Shake”, video que ha generado impacto no solo por haber sido compartido miles de veces, si no por tener alrededor de 100 mil imitaciones colgadas en YouTube. “La motivación por parte de mis amigos me llevó a imitar y ser parte de un par de vídeos de Harlem Shake que hacemos por simple diversión. Cualquier reunión de amigos puede finalizar con un Harlem Shake,” cuenta Andrés González, usuario de redes sociales.
Estos vídeos llegan a convertirse en virales porque son cortos, llamativos y generan cierta emoción en los usuarios, consumiéndose como una forma de distracción. Según José Méndez, algunos factores para que un vídeo se vuelva viral son: “la idea, la creatividad, la sorpresa, la difusión, la música, los textos, la locación y el tener la cámara lista en el momento justo”.
Así como el “Gangnam Style” fue remplazado por el “Harlem Shake” y este por el nuevo "Hallway Swimming", los vídeos pasan a un segundo plano después de ser reproducidos un sin número de veces, siendo sustituidos por un nuevo e impredecible producto viral.