Luisa Alvarado inició su carrera como diseñadora de modas cuando se dio cuenta que había poco mercado para su hijo Damián. Luego, trasladó su linea para niños a una que ella afirma "es mucho más potente": las mujeres. En ese momento, se dio cuenta que diseñar para ellas no es solo entregarles una chaqueta reinventada, es darles fuerza y poder.
Por eso, sus chaquetas tipo biker de cuero son el icono de Ducky Black. Alvarado quiere demostrar que "las mujeres podemos hacer las cosas por nosotras mismas". Así como ella pudo hacerlo a lo largo de su vida, al ser madre y estudiante de diseño de modas al mismo tiempo.
Esta joven diseñadora creó su propia empresa y al mismo tiempo
Al crear empresa y a la vez crearse a ella misma como mujer, y al recrear y evolucionar su marca, por ejemplo, diseñando nuevas prendas como pantalones y tops. Sin embargo, hay una idea con lo que Alvarado inició y no piensa dejarla: presentar una moda consciente, ser una diseñadora apasionada y siempre original.
Poco a poco, Alvarado, enfocó su marca a un tipo de público: las ‘leather adult girls’. Un movimiento de mujeres libres, independientes y fuertes, que están entre la imagen de chica dulce y fría, agresiva y femenina. Con este estilo más uno rocker en el que el negro prevalece, Alvarado logró que su marca estuviera en las pasarelas del BFW en el 2017 y este año lo volvió a conseguir. En la entrevista da un pequeño adelanto sobre la colección que mostró y también cuenta cómo esta marca le da poder a las mujeres y qué tan difícil es sobrevivir como diseñadora independiente en Colombia.
La inspiración para crear Ducky Black fue su hijo Damián con la línea para niños, pero ¿qué motivó su línea de mujeres?
Después de crear la línea para niños, porque algunas mamás veían a mi hijo vestido con mis diseños y me los pidieron, también me empezaron a pedir que diseñara para ellas. Querían verse en la misma onda y cuando tu tienes un hijo, te gusta ‘muñequearlo’ y hacer un match con él: verse muy parecidos. Entonces, Las mismas clientas fueron las que me empezaron a decirme “Oye, hazme para mi también” y comencé a hacer ese ejercicio y me di cuenta que había mucho más potencial en eso: en las mujeres.
¿Y el nombre Ducky Black tiene que ver con la línea de niños o mujeres?
Yo empecé a ver una clase en ese momento que había que desarrollar la marca. Pero yo lo tomé muy en serio por lo que estaba haciendo la línea para niños. Entonces dije “hagámosla para niños, pero esto en un momento va a crecer”. Yo ya lo tenía como una visión. Entonces, realmente era un nombre y un apellido: ‘Ducky’ de Luisa y ‘Black’ de Alvarado. Yo le iba a poner Mister Ducky Black pero era una marca para niños entonces el nombre era raro. Pensé, más bien pongámosle un nombre que cuando ya empiece a diseñar para adulto, sea muy genérico. Pero hice el logo con el patico de hule de bañar a los bebés para que fuera mucho más infantil, pero negro, porque esa era la tendencia que yo quería hacer: mamás jóvenes rockers que quieren que sus hijos se vean súper cool.
¿Cómo inició el diseño de chaquetas de cuero?
Al principio solo hacía chaquetas de algodón de colores oscuros, porque es lo más cómodo para ellos. Las mamás me las pedían de algodón también porque era lo que manejaba. Pero dije “No, aquí hay una oportunidad muy grande, no existe una línea de cuero para mujeres”. Claro, ahora sí hay un montón de marcas con un concepto parecido, obviamente no igual a Ducky Black, pero para ese momento no existía nada. Entonces saqué esa línea de cuero para mujeresm en un primer momento. Después, los hombres también pidieron que diseñara una línea para ellos y a la par de ese proyecto empecé a desarrollar el tema sobre de medidas personalizado.
¿Y por qué las chaquetas estilo biker?
Lo que yo hago es reinventar la chaqueta estilo biker, ella ya está elaborada, pero yo la reinvento con materiales y texturas.
En 2018 estuvo en la feria Buró con su colección Bloody Mary, basada en Reino Unido con telas escocesas y el cuero.¿Cómo le fue con esa colección?
Sí, el año pasado quise volver al concepto británico con toda la onda punk. Me inspiré en una diseñadora británica que se llama Vivienne Westwood. Ella maneja todo lo que es paños escoceses. No diseña chaquetas bikers, pero sí vestidos súper glamurosos que mantienen ese estilo punk. Entonces me quise ir por ese lado. ¿Por qué inglés? Porque los paños más reconocidos en el mundo entero son los esos. Pero yo decidí manifestarlo a través de mis chaquetas. En esa ocasión lo hice con la colección que se llamó Bloody Mary, que es un coctel a base de jugo de tomate, vodka y picante.
¿Qué siente ser una de las diseñadoras elegidas en la pasarela del Bogotá Fashion Week, tanto en el 2017 como en 2019?
Genial, porque acá no puede competir cualquier persona. La satisfacción es algo increíble, es como estar en un curso intensivo de diseñar tu colección. Estamos con jurados españolas y tenemos curadurías cada 15 días de revisión de colección y de todo, entonces el trabajo que se ha desarrollado ha sido realmente bastante conceptual y muy reflexivo con el tema del empoderamiento femenino. Aunque creo que ya deberíamos quitar esa palabra, porque está muy ‘quemada’. Más bien un trabajo reflexivo con las oportunidades femeninas y la igualdad de género.
Usted dijo que en BFW no compite cualquiera, ¿cómo es ese proceso para poder ser elegido?
Uno se inscribe, manda su portafolio y pasa con los jurados. No es que de una vez pases. Son muchos trabajos, muchas pruebas, hasta que llegas al final y te dicen “Sí, estás aprobada”. Es como una tesis. Y de ahí inicias un camino bastante fuerte y pesado. Con mucha tensión. Te pasa de todo, pero pues la satisfacción es increíble.
¿Por qué no participó el año pasado en este evento?
Realmente, no me presenté, porque decidí concursar en el Colombia Moda. Y pues es un concurso que también llevaba a cabo bastante tiempo. Entonces estuve trabajando en eso diciembre y enero, en febrero no pasé, quedé como semifinalista y ya era tarde para inscribirme al Bogotá Fashion Week. Por lo cual, decidí participar en feria Buró en julio.
¿Cuál es la colección que mostrará para este año en la semana de la moda?
¡Es una sorpresa! Pero, en esta oportunidad quiero representar un mensaje muy fuerte hacia la feminidad y el rompimiento de reglas establecidas por la sociedad. La colección tiene que ver con un personaje histórico que lo ha tratado de ocultar la historia. Como siempre a los personajes más representativos, los han tapado o han puesto al hombre y a la mujer atrás.
¿Quién es ese personaje? Denos un pequeño adelanto de esta colección
No lo puedo decir, pero esta mujer es alguien increíble en la época de 1700 a 1800. Ella representa ese rompimiento de reglas y estándares. Es oriental y pues es sorpresa. En esta ocasión tengo elementos maravillosos: sastrería en cuero, acabados a mano, gráficos increíbles, telas únicas hechas por DB y accesorios.Es la primera vez que voy a mostrar una colección con collares que elaboré yo misma con técnicas de tejido artesanal. Estoy muy feliz, muy nerviosa y muy contenta. Y pues nada, espero que todo salga perfecto mañana (4 de abril a las 4:00 de la tarde).
En una entrevista, usted afirmó que no le interesaba competir con marcas como Zara o cualquier tienda de la familia Inditex, ¿Por qué?
No me interesa competir con marcas como Inditex porque son a nivel masivo. A mí lo que me gusta es tener piezas exclusivas y únicas que tienen valores agregados que una marca como Zara no puede dar. Son prendas que se pueden dañar en un mes y no sabemos su proveniencia.
¿Cuál es el valor agregado que tiene DB?
Mis prendas sabemos quien las cose, quien las hace, de donde proviene el material y a donde se va ese material. Y eso es también ayudar con una moda responsable. Se pueden hacer sobre medidas y son diseños totalmente propios: mis gráficos y el concepto que hay detrás de la prenda no es cualquier cosa. Obviamente sí quiero llegar a tener más boutiques, pero con este mismo concepto y llegar a estas en ferias internacionales.
Y ¿Cuáles son sus objetivos y metas con Ducky Black?
Precisamente, mi idea el próximo año es estar en una feria en el exterior y en este Bogotá, realizar negocios con muchos ‘buyers’ (compradores) que van a venir de tiendas de México, Estados Unidos y Reino Unido. Entonces vamos a ver qué se puede desarrollar a partir de esto.
¿Cómo sobrevive una diseñadora independiente en un país como Colombia?
Me ha tocado difícil estos últimos tres años, porque se han activado marcas de gente que incluso ha trabajado conmigo y claro, ponen precios más bajos o algo así y eso afecta bastante. Pero pues nada, yo siempre arriba y finalmente esas marcas se van desapareciendo. Por otra parte, con el efecto de China, ahora hay tantos almacenes que antes no existían, además de Zara. Sin embargo, se trata de lo que te decía hace un momento. Mis prendas tienen un valor agregado.
¿Qué es lo que cree que hace sobrevivir su marca frente a tantas industrias comerciales que son competencia?
En muchas ocasiones, la parte creativa se va apartando por querer producir masivamente, como un Zara o un Éxito, pero eso no me ha sucedido: mi cabeza y corazón siempre han estado presentes en la marca. Entonces sé que voy hacia adelante y sé que después de este desfile la cosa va a crecer mucho más. Al final siempre van a haber problemas y errores, pero esos errores te hacen crecer mucho más. Solo los valientes y atrevidos siguen, los demás que se dediquen a otra cosa, hablando del tema de la moda.
¿Cómo define a Ducky Black después de ocho años de su lanzamiento oficial?
Es complicado. En este momento, diseño para hombres, niños y mujeres, pero realmente mi potencial es para las mujeres. Siempre reafirmando la fortaleza de la mujer cada vez que se pone una chaqueta y que puede contra el mundo, ese es el ideal. Puedo transformar a mujeres. Mujeres que son un poco tímidas, pero que después que les hago la chaqueta se sienten más fuertes, más capaces y se les sube su autoestima. El hecho de llevar un mensaje en la espalda de una banda o de algo que ellas me piden que les ponga, es algo satisfactorio. Entonces Ducky Black es una marca que lleva un mensaje positivo hacia la mujer. No es feminismo, no soy feminista y tampoco quiero decir la palabra empoderamiento. Ducky Black es una marca que me representa y yo soy una mujer que quiere darle esa fuerza a la mujer, esas ganas. Demostrarles a través de la marca y a través de los diseños que podemos hacerlo nosotras mismas.