Durante décadas el cerro de Monserrate ha sido el destino principal de fieles y personas del común en la Semana Santa, con el fin de celebrar la crucifixión y resurrección de Cristo. Muchas tradiciones como subir descalzos y hacer las confesiones ante el cura siguen en pie.
Durante décadas el cerro de Monserrate ha sido el destino principal de fieles y personas del común en la Semana Santa, con el fin de celebrar la crucifixión y resurrección de Cristo. Muchas tradiciones como subir descalzos y hacer las confesiones ante el cura siguen en pie.