Nos cansamos de oír en distintos medios y redes sobre la migración de venezolanos a Colombia, pero no se profundiza sobre lo que implica desplazarse irregularmente a otro país. Y mucho menos se coloca la lupa en la situación de las mujeres cuando migran, ya que están expuestas a vulneraciones, violaciones físicas y morales que poco se cuentan.
Por ello, esta crónica expone las vivencias de distintas mujeres que residen en La Parada, Villa del Rosario, donde sobreviven a los variados peligros tanto de los pasos fronterizos ilegales como de la misma Parada, donde los grupos armados y la anarquía reinan por sobre toda las cosas.