La contaminación, el mal manejo de las basuras, la falta de canalización de aguas residuales, el comercio ilegal de aves, la construcción de avenidas y la creación de barrios subnormales en sus alrededores son algunas de las causas que tienen en jaque a los trece humedales que todavía le quedan a Bogotá.
Las cifras son desalentadoras. De las 50 mil hectáreas que constituían los humedales en la capital, hoy quedan 667, que corresponde al 1,6%.
Las autoridades ambientales y la propia comunidad se han dado a la tarea de recuperar estos ecosistemas donde habitan numerosas especies de aves entre acuáticas y terrestres, lo mismo que plantas.
En el 2005, la Secretaría Distrital de Ambiente definió un Plan de Manejo Ambiental en el cual se consideró que por su valor biológico cada uno de los humedales debía ser declarado ‘Parque Ecológico Distrital, de manera que entraron a formar parte de las áreas protegidas por el Distrito.
Y por otro lado, están los habitantes de barrios aledaños a los humedales que buscan a través de jornadas de socialización demostrar la importancia que tienen estos lugares. Ellos se han convertido en los ángeles guardianes.
Plaza Capital visitó los trece humedales y presenta este informe especial. Encuéntrelo en la sección Ciudadanía- Seguimiento.