Durante la noche del 19 de agosto de 2011 en inmediaciones del puente de la calle 116 con avenida Boyacá en un caso de violencia policial. El joven grafitero Diego Felipe Becerra recibió un disparo por parte del patrullero Wilmer Alarcón. Luego de llamar a sus superiores fue ayudado para intentar alterar la escena del crimen y ser encubierto.
Plaza Capital habló con Gustavo Trejos y Liliana Lizarazo, padres de Diego Felipe, que cuentan en esta entrevista como sucedieron los hechos, hablan sobre quién era su hijo y los avances que han tenido con la justicia colombiana. No han sido años fáciles, han recibido amenazas y han tenido que dejar sus vidas a un lado para lograr una justicia en el caso. Sin embargo, esta historia como pocas en Colombia parece tener cierta satisfacción por parte de sus padres al condenar y capturar más de diez involucrados en el asesinato del grafitero.