Esta crónica evidencia las precariedades del sistema de salud desde la perspectiva de una persona que padece de una enfermedad terminal y que frecuentemente debe enfrentarse a largos períodos de espera para poder continuar con su tratamiento.
La leucemia, más conocida como el cáncer de sangre, es una enfermedad que ataca la médula ósea y la producción de glóbulos blancos. En Colombia 12.790 personas padecen esta enfermedad, pero más del 46% posee un diagnóstico fatal.
Con la reforma de la ley 100 en 1993, el Estado buscó crear un sistema privado que tuviera como propósito garantizar el derecho a la salud. El Sistema de Seguridad Social Integral es un modelo donde el ciudadano debe integrarse a Empresas Privadas de Salud (EPS) con el fin de empezar a pagar un fondo común que beneficie a todos los usuarios.
Por medio de este sistema se lograron avances grandes como la universalidad de la salud y la cobertura a nivel nacional. Sin embargo, debido al modelo económico monopolizado desde el Estado, diferentes problemas surgieron que afectaron a los usuarios. Esto sumado con la falta de infraestructura para cubrir satisfactoriamente a todos los pacientes.
Así, Johan Ruiez se enfrenta a una enfermedad que amenaza con llevárselo cualquier día y que, por lo precario del sistema de salud colombiano, le está ganando la batalla.