Para Alex 'El Rolo' Torres hay algo muy claro en la vida: no regular los combates de MMA (Artes Marciales Mixtas) representa un mayor peligro para los deportistas que no hacerlo en otras disciplinas. Es decir, el hecho que no se regulen estos eventos implica que la vida de las personas que compitan en ellos corra riesgo, algo que no sucede en el basquetbol, por ejemplo.
Aunque fue el primer peleador en combatir en la UFC, 'El Rolo' comenta que sus inicios no fueron fáciles. Él venía de un barrio popular de Bogotá y relata que cuando comenzó "las artes marciales mixtas estaban muy desorganizadas. No estaban bien reglamentadas, había eventos en los cuales (los promotores) solo buscaban lucrarse y no les importaban los deportistas".
En la UFC es insólito ver a un deportista peleando varias veces en un mismo día o incluso en un mismo mes. Sin embargo, en Colombia peleaba varias veces en una sola noche. Los combates eran sin protección y no se hacía el debido control de peso ni de drogas.
"Una vez peleé tres veces en una misma noche y gané. El premio era un viaje a Brasil y tres millones de pesos, pero nunca me dieron nada, me robaron", asegura.
‘El Rolo’ acabó la noche del evento en el que lo estafaron con una lesión en el codo y con varios golpes fuertes en las piernas, pero manifiesta que, aun así, la promotora le manifestó su intención de seguir organizando combates. Entendiblemente enfadado, decidió denunciar esto ante la comunidad de MMA en Colombia y se propuso intentar acabar con aquellas empresas que pretendían engañar a los peleadores.
A medida que siguió entrenando y ganando peleas, fue adquiriendo más fama en el país. Tras haber triunfado en varias organizaciones, decidió participar en el reality 'The Ultimate Fighter', un show organizado por la UFC que busca abrirle las puertas a peleadores amateurs para que luchen por una oportunidad de ganar un contrato con la organización.
Sin embargo, para Torres el cambio fue completamente drástico. "Acá tenemos todo el talento y toda la actitud, pero Estados Unidos (país donde se encuentra ubicada la UFC) es la cúspide, es otro nivel".
De igual manera, expresa que el sueño de ser peleador profesional parece ser más alcanzable en ese país: "desde acá parece solo un sueño, como algo irreal, pero en Estados Unidos ellos lo tienen ahí. Van al gimnasio y entrenan con peleadores de la UFC". Recuerda que durante su estadía allá, tuvo la oportunidad de compartir con talentos como Frankie Edgar y Edson Barboza, dos leyendas de este deporte.
Aunque perdió en su debut, Torres hizo historia y adquirió conocimientos que ayudaron a subir su nivel y a que pudiera llevar a cabo su cometido, organizar la escena de las MMA en Colombia. Cuenta que, con la fama, le surgieron más oportunidades y su influencia en la comunidad colombiana de artes marciales aumentó. Por esto, tuvo la oportunidad de comenzar a luchar contra aquellos "charlatanes", como él los llama, que buscaban timar y engañar a los peleadores.
Ahora que tiene una voz más fuerte en la comunidad, “el rolo” ha logrado acabar con varias organizaciones que no se preocupan por el bienestar de los peleadores. Lo ha hecho exponiendo a las personas que buscan engañar a los peleadores ante la comunidad de las MMA, con el fin de que los deportistas eviten trabajar con ellos. “De a poquitos hemos ido acabando con esas organizaciones piratas”. Sin embargo, hace énfasis en que no ha sido con ayuda del Estado, sino que ha sido mérito de los peleadores.
De igual manera, Torres manifestó que, junto a otro peleador colombiano de la UFC, Freddy Serrano, creó la fundación “Club equipo Serrano” en Bogotá con el fin de ayudar a niños de barrios populares a través de las MMA. A través de ella buscan que los niños se alejen durante dos horas de la violencia y el consumo de drogas que los suele rodear.
Por último, explica que se ha logrado un gran avance en el deporte desde el 2006 hasta la actualidad. A él no le cabe duda de que en Colombia “el talento está” y que el futuro de las MMA luce brillante en el país.