Sebastián nació el 10 de junio de 1980 en la ciudad de Manizales. Su familia fue un tanto atípica ya que a los dos meses de nacido sus papás se separaron, esto causó que su hermano, su mamá y él se fueran a vivir a la casa de su abuela materna. Esta vivienda estaba llena de muchos familiares y todo el tiempo estaba buscando un lugar donde pudiera estar solo.
“Sentía la necesidad de buscar un espacio en la soledad y yo lo encontraba en la música”
La pasión por la música nació de la necesidad de auto descubrirse, ahí es cuando encuentra un cuarto lleno de “chécheres” donde había un estéreo gigante y muchos discos LPs. los cuales ponía a sonar para así perderse en el sonido. todo esto mientras pensaba que él era quien tocaba todos esos instrumentos
A los 13 años se mudó a Bogotá. “cuando vivía en Manizales solía salir a perder el tiempo en las calles cuando llegaba de estudiar, como en la capital estaba empezando a salir el flagelo de Pablo Escobar y había mucho miedo en la ciudad no me era permitido salir como lo hacía antes.”
Al tener tanto tiempo libre aprendió solo escuchando los sonidos a tocar la guitarra, toda la vida ha sido autodidacta y cada instrumento que ha aprendido a tocar lo ha hecho solo.
En el colegio en Bogotá conoció a un grupo de pelados que también estaban interesados en la música y que tenían una banda. Al llegar tarde, el único instrumento que faltaba era el bajo, así que decidió aprender a tocarlo.
“Ahí entendí que la música era para mí. La música me dio mis amigos, me lo ha dado todo.”
En el año 1995 se devolvió a Manizales y por cosas de la adolescencia se alejó de la música. Años más tarde ya con problemas de amor y alcohol encima volvió a tocar en serenatas con sus amigos y ahí empezó a cantar, pero no fue por ningún don o algo parecido “yo era el que cantaba porque era el que tenía la guitarra”.
Debido a esto y con el pasar de los años volvió a Bogotá para estudiar música y se encontró con otra banda donde se hizo amigo al bajista. Tiempo después reunió a personas de Manizales en Bogotá y así nació Sanalejo, que en un inicio se llamó Reblujo.
El estrellato nació cuando una amiga de la banda les presentó a una persona que tiene una disquera y él les enseña todo lo que necesitaban saber del mundo de la música, les dijo que necesitaban conseguir a un productor y le recomendó al artista José Lopera. Después que escuchó sus canciones tomó la decisión de grabarles un disco.
Sebastián cuenta como una de las mayores anécdotas, que un día el cantante Juanes entró al estudio de grabación, escuchó las canciones y los animó a presentarse con la disquera Universal music. Ahí conocieron a Fidel Jaramillo quien los firmó como artistas y los ayudo a comenzar su carrera musical.
En el 2003 salió oficialmente el disco y después de esto el camino a la fama se fue haciendo cada vez más corto. Cinco años después ya estaban tocando en un estadio al frente de más de 38.000 personas que hacían mover el lugar cantando las canciones.
Después de alcanzar la fama y llegar a ser reconocidos por todo el país, como banda empezaron a tener diferencias, principalmente por lo que llaman falta de visión. En el año 2009 deciden separarse. Ahí es cuando Sebastián empieza como solista. Al inicio soberbio quería quitarse de encima la imagen que había creado con la banda y se negaba a cantar las canciones en sus conciertos.
“Fue un tiempo difícil porque la industria se fue al carajo, empecé cagarla y a hacer todo lo que no debía hacer.”
El negocio había cambiado y Sebastián seguía siendo el mismo, necesitaba innovar y todavía no lo sabía. “En el 2013 abrí los ojos, toque fondo. Yo estaba convencido de que la iba a hacer y no la hice.”
Después de vivir todo esto siguió intentado puesto que, aunque “trató de dejar la música, ella no lo dejó”. No se quería sentir frustrado por no haber hecho ciertas cosas en la vida, así que se arriesgó. Buscó una nueva ayuda que lo guiará en esta revolución musical y la encontró, aprovechó todas las oportunidades que la vida le estaba dando. Volvió a tocar las canciones de Sanalejo en los conciertos, no podía desaprovechar todo lo que la banda le había dado.
En el 2015 cuando Sanalejo volvió a juntarse él decidió no regresar con ellos porque sintió que no era el momento, siguió su camino como solista y en la actualidad es un artista muy querido por el público. Este 3 de mayo se presentó en el Royal Center junto a grandes artistas del género en el Tropipop is back, donde tocó por primera vez su nueva canción Rózame e hizo mover el lugar con un repertorio que incluía canciones como Me gusta y El diablo. El mundo de la música no ha terminado con Sebastián, por lo que le esperan muchos más éxitos.