Este año, la sexta versión de la Feria Internacional de Arte de Bogotá acercó a la niñez bogotana al arte en el Pabellón Infantil “Pon de tu parte”. Con el objetivo de enseñarle a los pequeños sobre las diferentes formas de creación más utilizadas por los artistas latinoamericanos contemporáneos, se realizaron cinco estaciones interactivas.

La instalación, la escultura, la pintura, el performance y la zona de cultura y talleres fueron los cinco espacios diseñados con el fin de que los niños se dieran cuenta que era necesaria su intervención para que el lugar se transformara. Este evento se realizó bajo la dirección general del Museo Nacional de Colombia.

Para Pablo, niño asistente al evento, las estaciones eran “rarísimas” pero una “nota” porque en todas pudo jugar y hacer figuras, dibujos y amigos. Aunque él directamente no sabía que estaba aprendiendo sobre algunas formas de expresión artísticas al preguntarle sobre qué era la instalación respondió “Pues es cuando uno entra al lugar y lo cambia”.

Los organizadores del pabellón quisieron que los niños accedieran al arte no por medio de la cátedra ni la teoría sino a través de la búsqueda y el descubrimiento. “Lo que buscamos aquí es generar espacios para que los niños a manera de exploración se introduzcan en los espacios del medio artístico” aseguró a PLAZA CAPITAL, Fabio López, Jefe de la pisión Educativa del Museo Nacional.

Así los espectadores aprendieron que en el performance ellos modifican el espacio a través de diferentes acciones. En esta estación se ubicó una pantalla  frente a la cual había un sensor que transformaba lo que se estaba reproduciendo cuando los niños ingresaban al lugar. En la estación de la escultura aprendieron la importancia del volumen en las figuras al jugar con cuadrados de diferentes tamaños. Se dieron cuenta que en la instalación se pueden crear formas y colores al experimentar con la luz y observaron cómo, al dibujar sobre una superficie, ésta cambia.

En la estación de cultura y talleres se estuvieron reproduciendo las obras de mil niños de colegios distritales que hacen parte del programa Hermes. Esta iniciativa  tiene que ver con métodos alternativos de solución de conflictos y es dirigida por la Cámara de Comercio. Sus obras se crearon con base en la pregunta Si pudieras inventar una forma diferente de ver el mundo, ¿cómo te gustaría que se viera y qué le cambiarías?

En esta feria, que se llevó a cabo del 21 al 25 de octubre, los pequeños aprendieron que el arte no es un dibujo en un papel, sino que es un medio en el que se pueden expresar y por el que pueden acercarse a los otros. Y lo más importante, por el que pueden entender al otro.