El hacinamiento en los centros penitenciarios de Colombia sigue siendo un asunto sin solución. Actualmente 112 de 143 cárceles que hay en el país tienen sobrepoblación. En mayo del año pasado el exministro de Justicia, Jorge Londoño declaró en estado de emergencia el sistema carcelario del país, los cambios han sido insuficientes desde entonces ya que actualmente viven 116.029 reclusos en infraestructuras destinadas para 78.734 personas.
Este año el Defensor del Pueblo, Carlos Negret solicitó la reapertura de la cárcel "La Tramacúa" con el objetivo de disminuir el hacinamiento en otras cárceles de Valledupar. También pidió a la Corte Constitucional el cierre de las cárceles de Riohacha en La Guajira y Bellavista en Antioquia por nivel de hacinamiento extremo. A pesar de estas acciones el hacinamiento sigue siendo muy alto.
Del total de reclusos que hay en el país (116.12), cerca del 30% son sindicados, es decir, no han recibido condena. Negret también ha propuesto no imputar cárcel intramural a delitos como la inasistencia alimentaria, calumnia e injuria y daño en bien ajeno.
Según un reporte de Bogotá Diversa y la Universidad Externado, "el hacinamiento para los reclusos no solo significa abandonar la idea de resocialización, por las pocas posibilidades que tienen dentro de una institución, también significa la deshumanización al no tener condiciones de salud y bienestar básicas. La violencia aumenta y cada vez son más las muertes que no pueden ser explicadas".
Plaza Capital le muestra en el siguiente mapa el nivel de hacinamiento que tiene las cárceles del país.