El número de carreras en Bogotá ha crecido considerablemente en los últimos años. Diferentes empresas privadas y fundaciones han generado cada vez más espacios para que las personas salgan a correr por las calles de la ciudad por competencia o diversión. Sin embargo, aunque varios eventos se promueven en favor de causas sociales, estudios mundiales demuestran que solo el 20% del dinero recaudado se invierte en estos fines.
Para correr en estas competencias se debe pagar una suma de dinero que generalmente oscila entre los 35 y los 70 mil pesos, lo que incluye el cupo para correr la carrera y un kit con implementos deportivos para correr como camisetas o termos. Según indicó el diario La República, se esperaba que The Color Run vendiera unos 800 millones de pesos en abonos.
Este dinero se invierte, en primer lugar, en la carrera misma. Toda empresa que quiera realizar una carrera en Bogotá, debe diseñar un plan de emergencias, que incluye un operador de salud, un equipo de brigadistas, una estrategia de manejo de tránsito, entre otros. Esto debe ser avalado en su totalidad por las secretarías competentes para cada caso (por ejemplo, si hay cierre de vía, Movilidad debe aprobarlo). Todos los servicios necesarios deben ser contratados por el responsable.
Además, si se necesita hacer uso de un escenario público, como un parque, se debe presentar la solicitud de préstamo ante el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), que estudiará el caso y liquidará una cuota para poder hacer uso del espacio. Según Alba Venegas, vocera del IDRD: “El valor del alquiler se calcula de acuerdo a la ocupación y a la publicidad que se utilizará. Para carreras como la Allianz 15K, que se realizará el 8 de junio, el alquiler de los espacios costó más de 50 millones de pesos”.
Existen competencias que buscan destinar los fondos a algún tipo de labor social. Jonathan Cadavid, organizador de la Pet Run, la primera carrera de hombres y perros de gran envergadura que se realizará el próximo 18 de mayo, indica que la idea general de la carrera es “proporcionar un espacio para correr y compartir”. Además, busca destinar fondos para construir nuevos refugios para animales vulnerables. Para ello, esperan entre 2000 y 3000 binomios (canino-humano) que ayuden a financiar más eventos de este tipo en otras ciudades del país.
En este mismo sentido están otras carreras como Unicef 10K y La Carrera de los Héroes, que tienen como objetivo principal recolectar fondos para obras sociales de las fundaciones organizadoras: Unicef y la Corporación Matamoros, respectivamente.
En contraste, otras carreras como We run Bogotá, Energizer Night Run o The Color Run, promueven espacios de esparcimiento, recreación y deporte que promocionen las diferentes marcas de las empresas organizadoras y sus patrocinadores.
De acuerdo a Nelson Gómez, analista de meArcadeo, las redes sociales han jugado un papel fundamental en el boom de las carreras, tanto a nivel local como nacional. Según Gómez: “las marcas han aprovechado esto muy bien”.
