Utilidad e ilegalidad, la compleja situación de los taxis colectivos en Colina Campestre

Miércoles, 10 Octubre 2018 13:05
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Los colectivos amarillos o, los también llamados, “taxis compartidos” llevan más de diez años funcionando de manera informal en este barrio en el noroccidente de Bogotá. 

. Colectivos estacionados a la espera de iniciar un nuevo recorrido.  El primero, escondiendo el número para evitar ser visto por la policía. Fotos: Isabella Amador||| . Colectivos estacionados a la espera de iniciar un nuevo recorrido. El primero, escondiendo el número para evitar ser visto por la policía. Fotos: Isabella Amador||| |||
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Según los usuarios y, por supuesto, los mismos conductores de colectivos, manifiestan que este es un transporte muy necesario y útil ya que evita largas caminadas hasta la estación de Transmilenio Alcalá (que queda en la Autopista con 136), puede transportar hasta cuatro personas cuesta solamente mil pesos.

El servicio empieza todos los días desde las 6 de la mañana hasta las ocho de la noche (aproximadamente) pasando por las calles 138 y 134, desde el centro comercial Porto Alegre hasta la estación de Transmilenio. Estos taxis (blancos o amarillos) se estacionan detrás del puente de Alcalá, en “la playa”, como laman los conductores a los lugares en los que se parquean gran cantidad de taxis. Allí, hacen filas organizados por un despachador, que ellos mismos pagan. Su función es organizar a los usuarios e indica a los taxistas la ruta que deben coger (134 o 138).

Por esta razón, es que nace la idea de un transporte informal pues, según *José, conductor de taxi colectivo, “el servicio nace como una respuesta a la falta de transporte efectivo, se necesitaba de uno que fuera rápido, barato y que acercara a las personas desde tan lejos. Porque este sector es muy grande se necesitaba de un transporte que acercara al transmi”.  Además, es un servicio rentable para los conductores pues, según el mismo José, sus ingresos son similares a los de un taxista externo al gremio de colectivos, su trabajo es menos peligroso y gasta menos combustible.

¿Por qué es informal este transporte?

Frente a este tema existen distintas opiniones: que es informal porque no está regulado, porque cuesta mil pesos, porque un taxi realiza su trabajo para llevar de un lugar a otro a un mismo cliente, más no a cuatro clientes diferentes, en fin, el punto es que esto no es claro para muchos usuarios.

 Luis Romero, abogado de la Universidad del Norte, explica que: “se considera informal porque no se encuentra regulado ni cumple con lo establecido en el Código Nacional de Tránsito Terrestre que es la Ley 1383 de 2010. En esta, se regula el transporte de pasajeros público y privado en todas las carreteras a nivel nacional además de definir y regular todos los medios de transporte de pasajero”.

 Resalta, además, que la regulación del transporte en Colombia se realiza por medio de leyes expedidas desde el Congreso y por decretos expedidos que desarrollan la ley de tránsito en Colombia.

Pero no basta con entender el porqué de la informalidad, esta situación tiene muchas implicaciones. Los taxistas formales manifiestan su descontento ante esta situación ya que los afecta y la policía emprende constantemente operativos contra esta informalidad.

El patrullero Luis Guillermo Niño recalca que, aunque los colectivos no cumplen con los estándares establecidos para el transporte público, el problema más grande es la inseguridad y la falta de conciencia de los usuarios frente a esto. Los conductores de los colectivos día a día usan sus celulares y los chats como medios para emprender la huida, para evitar los operativos, pero, especialmente, para evitar la inmovilización de su vehículo y el comparendo de siete millones de pesos. Por eso, la policía muchas veces no soluciona nada.

Luis Carlos, conductor de taxi formal, explica que tanto él como otros conductores prefieren no ir hasta Colina a buscar clientes puesto que el sector ya se encuentra cubierto, hay una cantidad muy grande de taxis y que además no puede recoger usuarios en los puntos específicos donde se parquean los colectivos porque lo terminan sacando. “Me dicen no, váyase de acá que esto ya está cubierto por nosotros”.

¿Qué dicen los usuarios?

Así, la informalidad ha traído varios problemas entre los colectivos, la policía y los taxis formales. Los usuarios opinan acerca de esta problemática y manifiestan entender la situación, aunque esta no les afecte mucho pues, como dice Natalia, una usuaria constante de estos colectivos: “es un servicio muy útil, práctico y necesario, porque estos maximizan el transporte dando a los usuarios un servicio rápido y barato. A pesar de las problematicas que pueda traer la informalidad no pienso que sea muy importante ya que se ha vuelto un servicio muy común y constante que realmente no hace ningún daño”.

Julián, otro usuario, reconoce que este es un problema con varias implicaciones sin embargo: “es un transporte que puede ser hasta más eficiente que el transporte público que nos presta la ciudad. Además de esto, pienso que si las autoridades trataran de parar este servicio, de igual forma seguiría funcionando ya que se ha vuelto muy casual en la vida de los ciudadanos”.

Es un servicio que, a pesar de su ilegalidad, ha solucionado una problemática de falta de transporte efectivo. Aún así, ha traído otros problemas que necesitan atención el tema del transporte informal no debería responder únicamente a las necesidades de las personas o a la necesidad de rebuscarse una fuente de ingreso por parte de los conductores. Como expresa el abogado Luis Romero: “esta situación requiere de un análisis de seguridad sobre las personas que lo utilizan y sobre los demás medios de transporte”.

*Nombre cambiado por petición de la fuente.