El ejemplo más reciente de esto se dio el pasado 8 de febrero, cuando el presidente Iván Duque anunció la creación del estatuto que permitirá el Registro Único para migrantes venezolanos, lo que los reconocerá de manera temporal como ciudadanos colombianos, pero con limitantes como el derecho al voto. Luego de este anuncio, los comentarios en redes sociales contra el proyecto no tardaron en verse, ya que muchos ciudadanos temen por sus empleos y la seguridad de sus ciudades.

Otro caso se dio el pasado 30 de octubre, tras una declaración de la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, donde decía: “no quiero estigmatizar a los venezolanos, pero hay unos que en serio nos están haciendo la vida de cuadritos. Aquí el que venga a trabajar bienvenido sea, pero el que venga a delinquir deberíamos deportarlos inmediatamente.” Este fue el día con mayor número de publicaciones en contra de la población migrante en Colombia. Se registró un incremento del 1.394% en publicaciones de xenofobia, en comparación a meses anteriores, esto se ve representado en alrededor de tres mil publicaciones de este tipo, de acuerdo con el Barómetro de Xenofobia.  

Este Barómetro es un proyecto de la Universidad Externado junto a la fundación Friedrich-Ebert-Stiftung en Colombia, Save The Children, la Corporación Otraparte, y la Fundación Interpreta. Esta organización se encarga de analizar y detectar los mensajes de odio en redes sociales como Twitter, para así prevenir este tipo de discursos y ofrecerle a los migrantes una mejor condición social en el país, no sólo a través de las redes sociales, sino en su vida diaria con beneficios como una mayor posibilidad de obtener empleos. 

La más evidente relación de los dos casos que han desatado la xenofobia en redes sociales es tomar la inseguridad como excusa para este tipo de mensajes discriminatorios; pues, muchas afirman que esta ha incrementado en el país desde la llegada de los venezolanos. Sin embargo, el Migration Policy Institute, organización encargada de investigar la migración en América y sus repercusiones, muestra mediante estudios que la proporción de arrestos a venezolanos no representa más del 5,4% de los arrestos que se dan en el país y las zonas donde más se presentan son precisamente los lugares con mayores tasas de desempleo, donde la falta de oportunidades que el país le brinda a los inmigrantes es superior.