Alimentarse contra sí y con todo en contra

Trastornos de la Conducta Alimentaria

Ver Más

INTRODUCCIÓN



“Es como una sanguijuela que literalmente absorbe absolutamente todo de ti. Pero solo hasta que estás muy muy mal, tú y la gente se dan cuenta. Está ahí chupándote y chupándote y tú no sientes nada, pero estás al borde del colapso y ahí es donde todo empieza a verse con un poco más de claridad” María Lugo

María Fernanda Lugo la asemeja con una sanguijuela que se adhiere a tu cerebro. Una enfermedad que destruye la vida despacio, tan despacio que solamente te das cuenta cuando ya es demasiado tarde; cuando te arrebata cosas difíciles de recuperar y otras que nunca se recuperan. Los trastornos de la conducta alimentaria son enfermedades mentales que te controlan la vida mientras te hacen creer que todo lo tenías bajo tu control.

Marcela Prada, médico psiquiatra especializada en Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), los define como “un grupo de enfermedades mentales donde lo que encontramos es que hay una dificultad con la alimentación. Bien sea para comer los alimentos, bien sea para mantenerlos en el cuerpo, o bien sea para controlar la ingesta. Gracias a una imagen corporal distorsionada”. En su experiencia, la mayoría de personas que tiene uno de estos trastornos ven la comida como un enemigo y expresan sus emociones a través de una relación inadecuada con la alimentación. Este es el patrón principal, el único elemento común de un TCA entre las personas que lo sufren: la comida es un lastre que pesa y obsesiona. Para la nutricionista Paola Sabogal, el único elemento característico de estos trastornos es que la comida está en el centro de todo. Si bien el peso y el cuerpo son piezas relevantes, es la comida el combustible que más aviva el fuego de un TCA, y el que más quema a quienes los padecen.

Cerca de 30 millones de estadounidenses serán afectados por un TCA a lo largo de su vida, según la National Eating Disorders Association (NEDA). Esta cifra se acerca a la población completa de países como Perú y supera la población completa de otros 152 países. En Colombia no hay un rastreo estadístico estatal de estos trastornos, únicamente hay unas pocas investigaciones que han encuestado grupos poblacionales pequeños tratando de hallar una aproximación a cuántas personas tienen o han tenido un TCA en el país. Aunque pueden presentar cifras relevantes para comprender el caso colombiano, aun así, la información existente es insuficiente; no hay datos para afirmar con exactitud cuántas personas podrían estar padeciendo esta enfermedad en un grupo de 100. Pero sí sabemos que, al menos, un 60% de la población mundial ha realizado dietas restrictivas, que tienen o han tenido conductas alimentarias de riesgo, si no un TCA. Así que podría decirse que seguramente todos conocemos a alguien que está luchando contra una de estas enfermedades, o somos esa persona.

Desafortunadamente, como en casi todo lo que tiene que ver con salud mental, los estudios de estos trastornos son muy recientes y muy difíciles de rastrear. No fue hasta la década de 1990 que la Asociación Americana de Psiquiatría APA, por sus siglas en inglés, incluyó los TCA dentro del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales: DSM-IV-TR, uno de los referentes universales más importantes para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades mentales. Adicionalmente, debido a que la mayoría de personas con un TCA no buscan tratamiento formal o no son diagnosticadas nunca, es difícil determinar cuál es la incidencia y la prevalencia de un trastorno alimenticio.

Este reportaje fue realizado a través de los testimonios de varias mujeres que han padecido o padecen algún trastorno del grupo de los TCA, los cuales están presentes como párrafos independientes a lolargo del texto. En este caso se incluye mi testimonio, el cual está narrado desde la experiencia que vivió mi familia en el proceso de mi enfermedad y tratamiento a través de un podcast. Con ello, pretendo relatar los aspectos fundamentales que afectan a las personas y a sus familiares.

Podcast

. . .

SECCIONES


Texto: Vivian Reyes

Ilustraciones: Vivian Reyes

Ilustración podcast y footer: Camilo Cuellar