Alexandra es una mujer trans del Caquetá, que hace 4 años decidió hacer su tránsito de género,
hormonarseTerapia hormonal feminizante se utiliza para inducir cambios físicos en el cuerpo provocados por hormonas femeninas durante la pubertad Mayo Clinic y finalmente, realizar la orquiectomía, cirugía para remover sus testículos y que estos no interfirieran con su tratamiento hormonal con estrógenos.
Para Alexandra, al igual que para muchas mujeres trans, el proceso de hormonarse ha sido automedicado por las barreras que tienen que atravesar debido a los estigmas y estereotipos que existen en el sistema de salud para las personas transgénero en el departamento del Caquetá.
“Desde que decides empezar el proceso de hormonas, te estrellas porque acá nadie te sabe atender y es mejor irse a la farmacia. La cirugía ha sido una lucha, porque tuve que poner una tutela para hacer valer mis derechos”, expresó Alexandra.
Sin embargo, ella es una de las pocas personas trans que cuenta con un trabajo estable que cubre también su seguro de salud. Según un estudio del Centro Nacional de Consultoría y la Cámara de Comerciantes LGBTCámara de Comerciantes LGBT de Colombia es una institución privada, sín ánimo de lucro, que nació en el año 2012, como una iniciativa dirigida a fortalecer y empoderar económica y socialmente a la comunidad LGBTI del país. Cámara de Comerciantes LGBT de Colombia, en 2016 apenas cuatro de cada cien personas trans en Colombia tenían un contrato laboral formal. En este momento, está afiliada a una EPS del departamento del Caquetá. Sin embargo, contar con una EPS no es sinónimo de tener una atención médica de calidad y menos en regiones alejados como el Caquetá.
La cantidad de especialistas en esta zona del país es menor en comparación a otras ciudades como Bogotá, Medellín o Barranquilla.Las personas trans se enfrentan a un primer obstáculo a la hora de querer hacer su tránsito y construir su identidad. En el Caquetá no hay especialistas que puedan formular hormonas, no hay endocrinólogos. La ciudad más cercana con esta atención es Neiva, en el departamento del Huila.
Esto le ocurrió junto a su amiga Jenny Daniela. Ambas se han apoyado en el proceso de tránsito y para ellas, más que un proceso, ha sido una guerra. “Guerra porque no hay un protocolo para atendernos, los profesionales no están preparados para entender que no estamos locas, sino que necesitamos una orientación para no consumir las hormonas automedicadas”, contó Alexandra.
Luego de este primer intento fallido en el que el médico general decidió no atenderla, Alexandra recurrió al conocimiento de sus amigas que ya se han ‘autohormonado’ y prefiere comprar en la droguería cualquier medicamento con estrógenos. Ella cuenta que esto no le trajo consecuencias médicas, pero que ahora es consciente de que le hubiera podido afectar no sólo su salud física, sino su salud mental. “Tomar estas hormonas me puso en riesgo, y aunque no me arrepiento de nada, hubiera podido ser muy malo para mi. Además, mi EPS no cuenta con especialistas en psicología o psiquiatría en la ciudad, solo en Neiva y un viaje hasta allá me cuesta dinero”.

Mario Angulo Mosquera es un médico, magíster en Endocrinología Pediátrica de la Universidad de Barcelona. Actualmente, es el director de la Clínica de Género para Niños y Adolescentes, director del Servicio de Endocrinología Pediátrica y Endocrinólogo Pediatra de la Fundación Clínica Valle de Lili.
Como experto en temas de salud, considera que es importante que los médicos aprendan sobre temas de género. “No podemos atender con prejuicios y para dejar de tenerlos, debemos informarnos, sólo así estas personas podrán acceder a un buen servicio de salud y a tener una esperanza de vida más alta, calidad de vida”, expresó Mosquera.
Según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH)Comisión Interamericana de Derechos Humanos es uno de los tres tribunales regionales de protección de los derechos humanos. Es una institución judicial autónoma cuyo objetivo es aplicar e interpretar la Convención Americana.Corte Interamericana de Derechos Humanos, la expectativa de vida de las personas trans, es en promedio de 35 años. El médico Mario Angulo Mosquera explicó, manifestó que es importante que un especialista sea el que envíe la dosis adecuada a cada paciente, porque debe buscarse la hormona que no afectará otros aspectos de su salud.
“El proceso hormonal es delicado y debe hacerse bien para que la persona vea los resultados que busca. La mayoría de personas trans tienden a automedicarse- por las falencias del sistema de salud- y esto supone un riesgo enorme, no sólo por las consecuencias en temas de salud física, sino porque no verán los resultados si no se hace de manera adecuada y esto les afectará su salud mental”, contó Mosquera.
Igualmente, para el endocrinólogo pediátrico, el proceso adecuado para estos pacientes no es a partir de los 18 años, sino antes de llegar a la adolescencia. “El 85% de las personas trans saben que lo son antes de los 18 años, y de ese porcentaje, la mayoría saben que lo son antes de la pubertad. Si a esto se le diera la atención adecuada, con hormonas y un buen tratamiento, se frena el crecimiento y a los 17 años de edad esta persona decide si quiere continuar con hormonas para cambiar su género, hacerse la cirugía, entre otros procesos”, expresó Mosquera.


*El 100% de nuestras entrevistadas, manifiestan que los profesionales de la salud de Florencia no están sensibilizados con las realidades de las personas trans, tampoco están capacitados para atender sus necesidades, han pospuesto sus citas médicas al menos una vez por miedo a que su género afectara la atención y han sido agredidos por parte de los profesionales de la salud.
Alexandra y Jenny Daniela, ahorraron para viajar a Neiva porque la EPS no cubre estos viajes, ni los costos extras que supone movilizarse a otra ciudad. Con respecto a esto, Ángela Falla, abogada y estudiante de maestría en género, políticas y sociedad, afirma que todas las EPS tienen la obligación de cubrir los gastos de los ciudadanos que por falta de especialistas en su región el sistema de salud los obligue a viajar a otra ciudad.
Sin embargo, ni Alexandra ni Jenny Daniela obtuvieron algún tipo de ayuda o compensación económica por el gasto de viajar a otra ciudad. Luego de algunas semanas de espera, lograron tener la cita médica con endocrinólogos en Neiva y así iniciar el proceso hormonal de manera correcta. Posterior a esto, ambas tenían claro que el paso a seguir era realizar la orquiectomía. Un suceso clave, según el endocrinólogo pediátrico Mosquera, para inhibir las hormonas femeninas o masculinas y que aquellas hormonas que consumen de acuerdo a su identidad, hagan efecto.
Alexandra y Daniela se enfrentaron a otra barrera: la EPS les negó la cirugía porque consideraban que era un tema estético y no de identidad. Ambas decidieron poner una tutela para hacer valer sus derechos con la asesoría de la Defensoría del Pueblo del Caquetá. Para la abogada Ángela Falla, esto es un claro ejemplo de cómo las entidades que brindan un servicio público siguen sin conocer las respuestas de la Corte Constitucional para estos casos.
“Hay un desconocimiento enorme de las políticas públicas a las cuales se deben acoger". La Corte Constitucional estableció en el 2018 la línea que deben seguir las EPS para atender a personas trans, además de la sentencia T-771/13, que señala:
Los procedimientos de penectomía totalPenectomía cirugía para extirpar una parte o todo el pene (órgano reproductivo masculino externo).Instituto Nacional del Cáncer y orquiectomía bilateral
Orquiectomía bilateral cirugía para extirpar ambos testículos. Tiene como objetivo detener la producción de andrógenos.Asociación Europea de Urologíasimple para realizar una vaginoplastia
Vaginoplastia por inversión peneana consiste en realizar una neovagina cutánea mediante la piel invertida del pene y del escroto. El objetivo es crear un complejo genital femenino tanto desde un punto de vista anatómico como estético y funcional.Cirugía de género, ordenados por el médico tratante a la accionante en el proceso de tutela referido y relativos a la reasignación de sexo, están incluidos de manera explícita en el
Para Alexandra y Jenny Daniela, ya se convirtió parte de la rutina exigir sus derechos con tutelas, acudir a una asesoría para demandar y acceder a sus derechos. Luego del papeleo, viajes, pleitos, cartas y espera, pudieron acceder ambas a la orquiectomía por parte de la EPS. Sin embargo, manifiestan su deseo de seguir con el proceso, pero esta vez a través de una fundación.
“Ya estoy cansada, no quiero seguir peleando con la EPS y pues ambas sabemos que nos van a negar la cirugía. Yo prefiero hacerlo con ayudas, recogiendo firmas, lo que sea, pero mi reasignación de sexo no la haré con tutelas”, afirmó Alexandra.