Desde el último registro realizado por el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) con respecto a los accesos a la fibra óptica en el país, se halló que tan solo el 11% de los usuarios en Bogotá contaban con este servicio en el 2023. Existen usuarios que prefieren mantener su conexión a internet por medio del cable coaxial (cableado de cobre), sin embargo, hay otros que requieren de la mejor conexión a internet (la fibra óptica) pero los operadores no ofrecen cobertura en sus hogares.
Las personas con acceso a internet tienen la opción de adquirir distintos tipos de planes, dependiendo de dónde se encuentren. En Bogotá, se ofrecen dos tipos de planes fijos: fibra óptica y cableado de cobre. Sus diferencias principales se basan en la calidad del internet, siendo la fibra la que cuenta con mejores propiedades y por esto mismo es más costoso contratar sus servicios.
¿Por qué no se ofrece fibra óptica en algunos sectores de Bogotá?
Son cuatro las empresas que brindan el servicio de fibra óptica en Bogotá: Claro, ETB, Movistar y Tigo. Ninguna de estas ofrece este servicio en la totalidad de las siguientes localidades: Ciudad Bolívar, Usme, Bosa, Tunjuelito, Rafael Uribe, San Cristóbal, Antonio Nariño, Los Mártires, Engativá, Kennedy, Usaquén y Suba. No hay una explicación común que describa las razones de este fenómeno, pero Diana Bernal ejecutiva comercial de la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá, aclara las principales razones:
Diana reconoce que existen diversas zonas sin el servicio de fibra, pero es enfática en que no se ha escogido premeditadamente los sectores de la ciudad que no cuentan con dicho servicio, sino que depende de factores tanto externos como internos de la compañía como la normatividad y el presupuesto de la empresa. Menciona que es indispensable tener en cuenta que existen lugares en donde se ha implementado el servicio de fibra óptica para propiedades horizontales pero no se ha hecho el respectivo despliegue a cada uno de los apartamentos o casas.
Teniendo en cuenta lo que la experta Bernal afirma, si la línea roja (que indica el transporte de la fibra óptica pasa) pasa cerca de su hogar, esto no significa necesariamente que usted vaya a tener disponible el servicio de internet de mayor velocidad, pues puede que su operadora no haya hecho el despliegue correspondiente.
En los últimos años, las principales empresas de telecomunicaciones en Colombia, como Claro, Movistar y Etb, han anunciado diferentes planes de expansión de cobertura de fibra óptica, teniendo en cuenta que varios sectores solo podían acceder a planes de cobertura con cobre.
En Bogotá, la empresa de telecomunicación ETB ha estado anunciando que planea llevar este servicio al 90% de los hogares en los próximos cuatros años, mientras que Movistar y Claro han realizado inversiones multimillonarios para mejorar su infraestructura en ciudades como Medellín y a nivel nacional. Estas iniciativas reflejan una respuesta a la demanda de conectividad que se solicitar actualmente, lo que podría generar la pregunta ¿Por qué no se había avanzado antes con esta expansión de la fibra óptica si la necesidad ya existía?
Nazario Jara López, profesional en ingeniería de acceso de Telefónica Colombia afirma que la expansión de Bogotá no se ha dado únicamente por limitaciones técnicas, sino también por decisiones estratégicas y económicas. Si bien existen áreas de alta cobertura como Chapinero Usaquén, muchas zonas aún no cuentan con este servicio debido a la complejidad en la infraestructura y la viabilidad financiera. La inversión en fibra óptica está condicionada por la demanda y la capacidad de obtener los permisos necesarios, lo que ralentiza el despliegue en sectores como Fontibón o Ciudad Bolívar. Esto confirma que las empresas priorizan las áreas más rentables y de fácil acceso, lo cual ha dejado rezagadas a otras zonas de menor desarrollo tecnológico
Lopez, menciona que la inversión en fibra óptica está condicionada por la demanda y la capacidad de obtener los permisos necesarios, lo que ralentiza el despliegue en sectores como Fontibón o Ciudad Bolívar. Esto confirma que las empresas priorizan las áreas más rentables y de fácil acceso, lo cual ha dejado rezagadas a otras zonas de menor desarrollo tecnológico
Esto refleja el comportamiento general de las empresas de telecomunicaciones en Colombia, donde pareciera que la expansión de la fibra óptica no ha sido únicamente una cuestión de capacidad técnica, sino de decisiones estratégicas basadas en rentabilidad. En el caso de Telefónica, al igual que con Movistar y Claro, las inversiones se concentran en áreas con alta demanda y donde las condiciones técnicas y comerciales permiten un despliegue más rentable.
Esto plantea una pregunta crucial: ¿la falta de cobertura en algunas zonas se debe realmente a obstáculos insuperables o a la falta de interés de las empresas en invertir en áreas menos rentables? La creciente competencia y la demanda por mejorar la conectividad han impulsado la expansión de la infraestructura, pero el desafío persiste en asegurar que el acceso a tecnología avanzada sea distribuido de manera equitativa en todas los sectores , sin que se favorezcan únicamente una áreas o localidades de Bogotá.
La expansión de la fibra óptica en Bogotá está sujeta a varias normas y permisos que deben obtener las operadoras. Por ejemplo, deben cumplir con el Código de Policía y las regulaciones del Plan de Ordenamiento Territorial (POT), que establecen directrices sobre el uso del espacio público y la instalación de infraestructura. También requieren permisos específicos de la Alcaldía para realizar excavaciones o obras en la vía pública. Además, es necesario coordinar con entidades como la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) para evitar interferencias con servicios existentes. Estas normativas buscan garantizar la seguridad, el orden y la calidad de vida en la ciudad, pero a menudo pueden ralentizar el proceso de expansión de la red de fibra óptica.