Las mascotas también son bienvenidas

Para quienes tienen perros o gatos en Colombia se les acabó la preocupación de dejar a sus mascotas solas todo el día en casa. El fenómeno pet friendly llegó a Colombia en lugares como centros comerciales, restaurantes y oficinas hacia finales del 2017 . Estos espacios permiten es que las mascotas de cuatro patas, en su mayoría perros, sean bienvenidos en diferentes lugares de recreación y así puedan acompañar a sus dueños.

Para el mismo año y según el Ministerio de Salud en Colombia se vacunaron más de 6 millones de mascotas y en este registro no se cuentan los animales que están en refugios y buscan un hogar. Según portafolio Hoy, en Bogotá, 7 de cada 10 hogares tiene perro y 4 de cada 10 tiene un gato. Con base en estas cifras, el ex alcalde Enrique Peñalosa justificó la modificación de la Ley 9 de 1979, que prohibía el ingreso de mascotas a restaurantes.

Sin embargo, no todos los establecimientos cumplen con las mismas normativas; ya que, en Colombia actualmente no hay una legislación que regule el concepto pet friendly. Existen algunas leyes nacionales, como la que modificó Peñalosa, pero cada establecimiento tiene su propio conjunto de normativas, lo que dificulta su regulación a nivel nacional.

Hay restaurantes que son enfáticos en ser dog friendly, es decir, ingresan únicamente perros; los demás animales domésticos como gatos o minipigs, no son bienvenidos. Cada local tiene el derecho de rechazar el ingreso a algún animal, ya sea por su raza, tamaño o especie; pero si por ejemplo, el perro es de alguna raza considerada por las leyes colombianas como peligrosos, no solo deben ingresar con bozal sino que pueden incluso no ser admitidos.

Pasear con las  mascotas por la ciudad, es una actividad común, lúdica y relajante. Sin embargo, al intentar hacer recorrer la ciudad y hacer actividades cotidiana  como ir al supermercado, ir a pagar al banco, ingresar a restaurantes, o visitar lugares públicos como centros comerciales con las mascotas, se puede convertir en motivo de problemas. 

Centros comerciales

El primer centro comercial que permitió en ingreso de mascotas en el 2017 fue Centro Chía y, ese mismo año, se sumaron a la iniciativa Hacienda Santa Bárbara, Atlantis Plaza y Santa Fé. Ya para el 2020, todos los centros comerciales de la capital tienen permitido el acceso de mascotas, pero las normativas han cambiado durante estos años. Al comienzo, podían entrar exclusivamente si tenían correa; hoy dependiendo del tamaño, hay unos canes que requieren de la utilización de coches especiales que el mismo centro comercial alquila para los usuarios.

Esta medida de los coches se tomó para evitar que los animales hicieran sus necesidades dentro del centro comercial, pues era muy recurrente. Si esto ocurre, es el dueño quien se debe encargar de la limpieza. Así lo señala Lady Johana Valencia, quien trabaja en el centro de información del centro comercial Unicentro. Este es un inconveniente de sanidad, ya que después de que el dueño se encarga de limpiar lo que su mascota hizo, no hay una fase de descontaminación.

Los centros comerciales son espacios que cuentan con diferentes espacios, la ya sean tiendas de ropa, plazoletas de comida, zona de juegos, etc. En ningún caso deberían las mascotas ingresar a espacios en donde se manejen alimentos por varias razones: sanidad, evitar peleas entre mascotas y evitar incomodar a los demás visitantes. Sin embargo, Valencia nos comenta en particular en Unicentro, cada local decide si las mascotas ingresan o no y cómo deben entrar. Si es un perro pequeño y su dueña lo lleva en los brazos puede ingresar en locales de venta de ropa e incluso en tiendas de venta de dulces.

 No hay una legislación fuerte frente a estos lugares a los cuales según Lady Johana  asisten más de 50 mascotas al día (cifra que en fines de semana crece más del doble) que sea igual en todos los centros comerciales del país y que garantice la tranquilidad de las mascotas, los dueños y los demás asistentes al cc. 

Restaurantes

"Las personas pretenden que los animales se comporten como un humano”, afirma Gloria González, una comensal de un restaurante de la zona G en Bogotá, luego de presenciar una pelea de perros en la zona pet friendly. “El dueño de uno de los perros que estaban peleando, lo sacó del restaurante y además le pegó”, comenta Gloria.  Este es uno de los principales inconvenientes que tienen los lugares que permiten el ingreso de mascotas; son animales y tienen una serie de comportamientos que no siempre se pueden evitar.

Los restaurantes pet friendly deben tener por ley un espacio abierto, como una terraza, para que allí estén los animales, pues es en esos lugares en donde menos se manipulan alimentos. Carlos, jefe del área de servicios de Abasto, un restaurante de Bogotá que cuenta con dos sedes, una en Usaquén y otra en la calle 69, explica por qué uno es pet friendly y el otro no. La razón es, precisamente, porque solo uno de los locales cuenta con terraza. Carlos además afirma que, en este restaurante, cuentan con un trapero, escoba y recogedor especial para las necesidades de los animales; y que estos elementos de aseo no son los mismos que se utilizan para todo el local.

Sin embargo, Ángela Téllez, ingeniera de alimentos con maestría y doctorado en ciencia de alimentos, explica que los animales traen en sus patas bacterias de la calle y, con el solo contacto del animal con una mesa, la contaminación en el restaurante es inminente. Téllez dice que es muy probable que los animales tengan accidentes relacionados con sus necesidades y la forma correcta de limpiar no existe. “El trapero o escoba es el principal difusor de bacterias”, comenta Ángela. 

Hay otros restaurantes, en donde la atención es más impersonal que al igual que en los centros comerciales los dueños de las mascotas son los encargados de la limpieza en caso de accidente, como lo son Mc Donalds,  El Corral y la mayoría de restaurantes que quedan dentro de los cc. 

También existen otros restaurantes en donde las mascotas son más que bienvenidas. Por ejemplo está la panadería Bagatelle, que tiene 6 sedes en Bogotá, que le brinda a los perros una galleta especial de bienvenida, y también está el caso de los restaurantes campestres a las afueras de Bogotá en donde se consiguen helados para humanos y para perros.

Los cat café son espacios menos comunes pero que en la ciudada de Bogotá ya hay por lo menos dos, Gatos y Blues y Cálico. Estos son lugares un tanto diferentes ya que sí son pet friendly per la idea no es que el dueño llegue con su gato sino que salga con uno. Estos son cafés en donde usted puede disfrutar de su comida y la compañía de gatos que se encuentran en adopción. 

Oficinas

Los perros y gatos también van a la oficina. En Medellín, Barranquilla y Bogotá ya existen oficinas que permiten que sus dueños vayan a trabajar con sus mascotas. Esta iniciativa comenzó en Estados unidos y países de Europa. En Colombia, se encuentran los casos de emprendimientos como Team It en Medellín y agencias de publicidad y redes sociales como PyM, TBWA y Coco Social Media.

Según diferentes estudios, como el realizado por Wells and Perrine, los funcionarios con mascotas en el lugar de trabajo liberan 21% más estrés si tienen perro y 29% si tienen un gato. “Los animales tienen una forma de aceptación sin juicios, no condicionan su amor, perdonan fácilmente’. Es por esto que las relaciones con los animales resultan menos amenazantes que las relaciones con otras personas”, aseguran también Pichot y Colter.

 Jaime Arteaga de Brigard, director de Jaime Arteaga y Asociados, dice que su oficina en Bogotá inició el tránsito a pet friendly porque no quería que su perro se quedara todo el día solo en casa y que, por el contrario en la oficina, recibía mucha atención y cariño por parte de los empleados. Asimismo, invitó a los demás miembros de la empresa a llevar a sus mascotas, es así como hoy en la oficina hay cerca de 4 perros diarios que comparten con administrativos, trabajadores y personas de servicio.

No obstante, para implementar la dinámica de oficinas dog friendly se necesita establecer procesos, tanto para la oficina como para los propietarios de las mascotas. Esto debido a que la experiencia tiene que ser agradable para el funcionario, la mascota y los otros trabajadores. Laura Arteaga, miembro del equipo de recursos humanos de JAA, explica que se necesita que los animales que sean llevados a la oficina cumplan con normas de comportamiento, deben tener su carnet de vacunación y sus dueños deben encargarse de llevar alimentos y sacarlos afuera de la oficina para que tengan espacios para sus necesidades y recreación.

“Es un trabajo en que todos los empleados deben ayudar, porque si alguien le da comida al perro de otro compañero, se puede enfermar; por eso es responsabilidad de todos cuidar a los animales”. 

Además, Laura cuenta en la oficina se debe mantener un ciclo de limpieza especial por los accidentes que suelen ocurrir, y porque hay empleados alérgicos a los animales y por ello deben tener más cuidado sobre todo con la limpieza. “En este caso, los empleados al ser contratados se les informó que este era un espacio dogfriendly”. Para esto, la oficina cuenta con medicamentos básicos como loratadina o desloratadina para este tipo de situaciones. 

Al igual que los centros comerciales y los restaurantes, las oficinas que admiten mascotas no tienen una legislación nacional que las regule, además, porque de estos 3 espacios pet friendly esta última es menos común. Sin embargo, sí hay una serie de condiciones básicas para que una oficina sea un espacio pet friendly: es necesario que el dueño certifique que la mascota tiene con su carné de vacunación al día, que se encuentra desparasitada y que no tiene antecedentes de agresividad hacia otros animales o personas. Por su parte Petlist Colombia tiene un manual y guía pet friendly para negocios en donde afirman que se necesitan que la mascota cuente con correas o traíllas bolsas plásticas para desechos. (vómito o excremento), bebedero o punto de hidratación para mascotas entre otras. 

Todo esto es muy importante que según el Ranking Mundial Pet Friendly, el cual tiene en cuenta a los países a favor de los animales y con espacios diseñados para mascotas, Colombia ocupa el noveno lugar en América de los países con mayor desarrollo de esta cultura.