Canta la salsa, llora el negocio

Canta la salsa, llora el negocio

El cambio generacional de los artistas y la poca rentabilidad de las presentaciones de las orquestas salseras, nos hacen preguntarnos: ¿La salsa está evolucionando o desapareciendo?

Capítulo 1

“La salsa es una moda y como todas las modas están destinadas a terminar”, fueron las palabras con las que el cantante, compositor y arreglista venezolano, Orlando José Castillo “Watussi”, reflexionó sobre el estado y la vigencia del género musical de la salsa. Pero él, a sus 70 años, no sólo siente y analiza que la salsa es una tendencia de épocas, sino además que su público y sus fans también envejecieron y ya no tienen la misma vigorosidad física para seguirlo en sus presentaciones.

La canción de Watussi "Las calaveras blancas" (1986) es una de las más representativas por su reflexión sobre la muerte. (Foto archivo)
En marzo de este año, Orlando “Watussi” decidió regresar a Colombia, luego de estar viviendo por más de 20 años en Italia. Pero a su regreso a Latinoamérica, luego de 40 años de trayectoria musical, y junto con las diferentes presentaciones que brindó, él se encontró con que sus seguidores no lo conocían.

“Los seguidores conocen tus canciones, tus vídeos, pero no te conocen a ti. Pero es una cuestión de diferenciar al personaje de la persona, al artista del ser humano”, expresó “Watussi” mientras analizaba la participación de la música salsera dentro del negocio y la producción musical.

Ricardo Herrera, director y fundador de la emisora virtual Tin Tin Deo, fue la persona que se encargó de traer a Colombia a “Watussi”. Entre ellos entablaron una interacción a través de mensajes por redes sociales y “Richi”, como le llaman sus amigos cercanos, comentó que: “traer de regreso a una leyenda salsera como “Watu” ha sido como un sueño cumplido, tristemente, el público al que él le canta en las tarimas ya no lo distinguen o lo asocian con algo actual”.

Capítulo 2

¿Evolución o desaparición de la salsa?

Para Ricardo Herrera, director de Tin Tin Deo, la salsa ha tenido sus altibajos en el transcurrir de las décadas, y pasó de ser un negocio rentable a muy poco rentable.

“La salsa comenzó como un movimiento muy fuerte en los años 60´s y 70´s en especial por la comercialización de los discos en vinilo. Toda la población latina de Cuba, Venezuela, Colombia, Puerto Rico y la participación neoyorquina de Estados Unidos se encargaron de fortalecer esa euforia salsera, en especial, con la presencia de la agrupación la Fania All Stars, y todos los músicos que con ella logró traer”, comenta Ricardo Herrera, mientras analiza la evolución salsera y los géneros musicales que de ella se derivaron.

Orlando Watussi (derecha) junto a Héctor Lavoe (medio). (Foto archivo)
La Fania All Stars se caracterizó por reclutar y hacer partícipes a grandes artistas durante las décadas de los años 60´s y 70´s como, por ejemplo, Héctor Lavoe, Celia Cruz, Jhonny Pachecho, Willie Colón, Ismael Rivera, Rey Barreto, entre otros grandes artistas.

Pero así como la Fania All Stars y todos sus músicos lograron contar con gran reconocimiento y popularidad, también hubo otros no tan reconocidos con iguales o mejores cualidades artísticas, según lo comentó Ricardo Herrera.

Para Orlando “Watussi”, quien se convirtió en el primer venezolano en cantar en el Madison Square Garden de Nueva York con la banda “Los Satélites” en 1974: “Es más importante cantar bien que ser consagrado, yo no creo en la bravura de un cantante porque sea el más escuchado o el más comercializado. Yo conocí artistas que fueron más bravos que los propios bravos. Por eso es muy importante diferenciar en una carrera musical la consagración del propio arte”.

"Watussi" fue el primer cantante venezolano en presentarse en el Madison Square Garden (1974) con la orquesta Los Satélite.
La carrera musical de Orlando “Watussi” siempre estuvo ligada a la salsa y el jazz en sus inicios en 1969, dentro del ambiente latino propiciado en el Bronx de Nueva York. Compartió tarima y trabajos musicales con orquestas como el Sexteto Monterola, la Fania All Stars, Los Satélites de Cheché Mendoza la Orquesta de Porfi Jiménez y el Combo Cortijo.

Y en la construcción de la carrera salsera de Orlando, también la propia salsa fue evolucionando, según lo explica Ricardo: “En los años 80´s el boom de la salsa cayó, porque aparecieron otros géneros derivados como fueron los casos de la salsa romántica, el merengue o la bachata”.

“La salsa ha tenido sus cambios musicales, puede ser por evolución o desaparición, pero lo cierto es que algunos artistas han quedado en el olvido”, expresó Ricardo.

La evolución u ocaso de la salsa surgió no solo por el transcurrir del tiempo y los años que conllevan llegar a la vejez para los artistas y el público, sino también porque la inversión y la rentabilidad económica ya no son suficientes para competir dentro del negocio.


Capítulo 3

Las dificultades económicas del negocio salsero

El espectro de posibilidades musicales a escuchar se amplió para el público, ya no era suficiente con disfrutar de la salsa dura (compuesta por varios instrumentos y músicos de una orquesta), sino que las personas vieron otras oportunidades para disfrutar y gozar la música, según lo comentó Herrera.

El gusto por la música no distingue tiempo o dinero, como lo es el caso de Enrique “Quique” Sánchez, melómano, Dj, promotor de eventos salseros y coleccionista de más de 500 discos en vinilo, CD´s, casetes y suvenires musicales, nos dice que “el valor de la música va más allá del género musical que se escuche”.

Enrique Sánchez, melómano y coleccionista musical, cuenta con una colección de más de 500 discos. (Foto Camilo Sánchez)
“La música salsera se convirtió en un negocio poco rentable, porque contratar, pagar tiquetes, hospedaje y todo lo que conlleva desplazar a una banda de 10, 12 o 24 músicos sale demasiado costoso. A comparación de solo traer al cantante principal y colocarle la banda”, explica “Quique” Sánchez, quién a través de su página web, de Mundo Salsero, promueve la organización de eventos y la contratación de orquestas y artistas de salsa en Bogotá. Al traer a orquestas salseras como la Sonora Ponceña, El Gran Combo de Puerto Rico o la banda de Willie Rosario la rentabilidad ha sido baja y los sobre costos han sido elevados.

Al consultar sobre la rentabilidad de las presentaciones salseras al promotor Enrique Sánchez, este explicó: “El artista de salsa romántica, el show principal es el cantante. No necesita desplazar a toda una orquesta. Eso ha hecho que el negocio salsero vaya decayendo. Por ejemplo, de los artistas más rentables y que siempre generan un negocio redondo es Maelo Ruíz, cantante que viaja solo y a quien únicamente se le contrata una banda para que lo acompañe en una presentación”.

En definitiva la decisión será del empresario, si por un lado decide contratar a un solo artista o, por lado, a 12 o 20 músicos.

La situación comercial y económica de la salsa no solo responde a la dinámica del negocio musical y de la demanda de artistas u oferta del público, sino también a una discusión de arte vs salsa.

Para Orlando “Watussi” el problema actual que vive la salsa no es la oferta y la demanda del negocio salsero, en cuanto espectáculos, traslados de orquestas o derivaciones musicales de la salsa, sino en la falta de innovación y originalidad de los artistas.

Para Enrique, su colección es invaluable y espera que su hija herede su legado musical. (Foto Camilo Sánchez)
“El arte se convirtió en una materia de comercio: el artista o personaje se utilizan para ganar dinero y no para hacer arte. En mi caso yo tengo la fortuna de no ser consagrado, si es que consagrado significa tener mayor comercialización, pero menos talento”, enfatizó “Watussi”.

El público sigue bailando salsa, pero el negocio llora y el artista envejece. El presente y el futuro de la salsa está en las raíces y el legado de las orquestas del pasado, pero también en la osadía de los nuevos artistas por construir una originalidad en sus carreras y del reto de los nuevos canales de comunicación salseros por mostrar otras melodías salseras.

Capítulo 2

Juventudes salseras

Las jóvenes generaciones salseras están copando los escenarios de baile en Cali, la sucursal del cielo, y a ellos se han sumado otro tipo de audiencias que asisten a los bares y los festivales que organizan en cada ciudad de Colombia como, por ejemplo, Salsa al Parque en Bogotá o Las Leyendas Vivas de la Salsa en Medellín.

Los invitamos a escuchar el siguiente podcast que habla sobre la participación de los jóvenes artistas de salsa y la difusión que les dan las emisoras de salsa virtual.





Las juventudes salseras son el presente y el futuro del género musical de la salsa. Los jóvenes artistas están llamados a convertirse en los próximos exponentes salseros y es ahí donde las emisoras virtuales de salsa y los nuevos medios digitales están llamados a transformar el mercado cotidiano y emigrar a plataformas como Spority, Youtube, Amazon y cualquier tipo de red social.


Trabajo realizado por Iván Villalba e Iván Umaña. Agradecimiento especial a Alejandro Herrera.